“Es urgente entender que sin abejas no hay futuro”, clame Carlos Ramírez Marín, el senador Yucateco que este martes se pronunció por darle importancia al tema, no sólo por conciencia ecológica, sino porque estos insectos permiten la polinización y gran parte de la producción de alimento humano.
Yucatán se encuentra entre los tres principales productores de miel y preservar la salud de las abejas también es garantizar el sustento a miles de familias en la entidad, añadió.
En la actualidad, hay riesgo de ue cientos de apicultores corren el riesgo de perder sus registros de miel orgánica esto debido a «la desmedida contaminación del agua y a la falta de mejores medidas de protección para la preservación de las abejas».
En el marco del Día Mundial del Agua, explicó que la protección de los mantos freáticos de la península es indispensable para permitir que el sector apicultor yucateco permanezca entre los principales exportadores del país, y referencia a nivel mundial. “No sólo se trata de mantener la calidad de nuestro sector apícola, se trata de mantener la continuidad de nuestro planeta; sin abejas no hay cultivos, no hay alimentos. Hay que ser enfáticos: Sin abejas no hay futuro”, enfatizó.
En Yucatán hay más de 13 mil apicultores, lo que significa que son miles de familias las que dependen de esta actividad como modo de vida y que, a su vez, cuidan y procuran el medio ambiente para garantizar la conservación de las abejas y otros polizidores.