Un tramo de esta obra insignia de la 4T en los alrededores de Bacalar y Chetumal, en Quintana Roo, se encuentra cubierta por la inundación causada por la lluvia de los últimos días
La obra del Tren Maya, uno de los proyectos insignia que sigue presumiendo el populista presidente Andrés Manuel López Obrador, que como esta no hay otra igual en el mundo y que sigue sin concluirse en varios de sus tramos, vuelve a acaparar reflectores, pero ahora porque al menos 1.5 kilómetros de su vía en el sur de Quintana Roo están bajo el agua por causa de las lluvias de días recientes. La región es conocida por acumular el agua de la lluvia y por sobrepasar en varios metros su nivel, algo que expertos medioambientalistas advirtieron a Ingenieros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pero fueron ignorados.
La obra del Tren Maya además de presentar fallas en su trazado, sin contar con el ecocidio en la selva entre los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, también fue realizada al vapor para complacer los berrinches del populista mandatario, a quien no importaron las advertencias de expertos en medio ambiente que no sólo advirtieron sino que subrayaron a los ingenieros militares encargados de la obra, que los alrededores de la zona de Bacalar y Chetumal, en Quintana Roo, son puntos inundables en cada temporada de lluvia, pero este aviso paso de un oído y salió por el otro.
Las consecuencias ahí están, lo que fue expuesto por lugareños de comunidades aledañas y que se han visto afectados por las lluvias y las inundaciones.
Los vecinos señalan que el agua cubre al menos un kilómetro y medio de un sector de la vía de la obra del Tren Maya, ese tramo que está inconcluso y del que no hay fecha para que sea concluido. Al menos este tramo de vía está un par de metros bajo el agua.
Lugareños de la colonia Diego Rojas Zapata, en el sur del estado y han expresado su preocupación por la falta de ayuda de las autoridades de los tres niveles de gobierno, señalaron que una gran extensión de la zona está al menos 3.5 metro bajo el agua, entre ellas casas y vehículos que han quedado cubiertas en gran parte por la inundación.
Uno de los tramos es la zona de vías del Tren Maya, punto que se observa abandonado y sin ningún trabajador, ya que no hay donde protegerse ni ponerse a salvo, denunció uno de los vecinos que pidió el anonimato.
Habrá que esperara que disminuya el nivel del agua para ver la real afectación tanto en las comunidades, que es lo que realmente importa, y luego ver cómo quedó este tramo del Tren Maya, una obra que se hizo sin un diagnóstico real, sin tomar en cuenta riesgos de esta naturaleza y que se hizo al aventón para complacer un berrinche más del aún huésped de Palacio Nacional.