Los habitantes de la Ciudad de México lamentablemente se han acostumbrado a coexistir no sólo con las mascotas tradicionales como perros, gatos, aves y según datos de Especialistas en Fauna y Salud de la Ciudad de México comparten su hábitat con fauna nociva como cucarachas, ratas y en fechas recientes animales de ponzoña como alacranes y arañas.
Ante tal escenario la vice coordinadora del GPPRI en la ALDF, Alicia Téllez Sánchez, presentó ante la Diputación Permanente un Punto de Acuerdo en donde exhorta al Secretario de Salud del DF, Armando Ahued Ortega a girar instrucciones a las áreas correspondientes de su dependencia para que, en tanto no se instale la Agencia de Protección Sanitaria del Distrito Federal, la Dependencia a su cargo realice campañas de fumigación y control de plagas en la Central de Abastos, los 318 Mercados Públicos, centros de abastos y similares, pues la fauna nociva ya nos alcanzó.
Pide también un informe por escrito y pormenorizado en el que se establezcan las acciones que a la fecha la SSDF ha realizado o está por realizar para implementar campañas sanitarias, que son de urgente y obvia aplicación.
Téllez Sánchez explicó que datos de la Secretaría de Salud del DF existen dos factores determinantes para el crecimiento de esta plaga: encontrar posibilidades de alimentarse y tener dónde refugiarse, por lo que, al combatir ambos aspectos, se puede controlar hasta 90 por ciento la presencia de las ratas.
“No podemos permitir que los sitios en donde las familias capitalinas se abastecen de los alimentos básicos, estén saturados de fauna nociva (ratas, ratones, cucarachas, moscas, etc.) sólo por falta o descuido de la higiene, por lo que responsabiliza a locatarios y autoridades de la Ciudad como culpables de escenarios desagradables, en una actividad que debe ser pulcra, inmaculada, nítida.
La fracción del PRI en la ALDF lamentó que a un año de haber sido aprobada la Ley de Salud del Distrito Federal, la Agencia de Protección Sanitaria no ha entrado en funciones, por lo que la Secretaria de Salud local, ha dejado de lado la obligación de fumigar, controlar o erradicar las plagas de fauna nociva en centros de abasto, mercados públicos y la Central de Abasto.