El próximo lunes, en el mismo edificio donde hace meses se presentó “Méxicolectivo, cuyos buenos augurios fueron sofocados en 24 horas desde el Palacio Nacional con la defección del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y el anatema del presidente López Obrador en contra de quien fue en su tiempo amigo y protector (hasta Lázaro fue echado de su vera), será presentada una nueva versión de ese mismo o afán: Una nueva visión de país.
En el documento de presentación, elaborado por Guadalupe Flores Medrano y Bernardo Ávalos Casillas, tomando como base los 27 textos realizados en colectivo por 289 personas, integrantes del grupo Mexicolectivo. Durante los seis primeros meses de 2023, a partir de una metodología común y una intensa labor de coordinación”, se afirma entre otras cosas:
“…Tenemos un “pluralismo sin consecuencias” (un Congreso que no define gasto púbico; no influye en programas de gobierno; no controla cuenta pública; no tiene controles sistemáticos sobre gobernantes, ni mayores facultades de investigación sobre la administración pública; no hay derechos para minorías parlamentarias).
“El Índice de Democracia es una clasificación hecha por la Unidad de Inteligencia de The Economist, desde 2008. En 2022, México ocupó el lugar 89 entre 167 naciones observadas, con 5.25 puntos. Este índice considera varios factores clave: proceso electoral (México con 6.92 puntos50); funcionamiento del gobierno (con 4.64 puntos); participación política (con 7.22 puntos); cultura política (con 1.88 puntos, o sea, que no votan por convicciones, sino por “compra de voto”); y derechos civiles (con 5.59 puntos.
“Somos ahora, como lo indica The Economist, un régimen político en la zona de las “democracias híbridas, en camino al autoritarismo”; mientras en 2012 estábamos considerados como una “democracia deficiente”, con 6.9 puntos de clasificación.
“Un mal gobierno, ineficaz y corrupto. La corrupción socava la confianza pública e interpersonal; profundiza las desigualdades; erosiona la legitimidad de los gobiernos; debilita las capacidades del Estado, y vulnera el ejercicio de derechos.
“El uso discrecional y opaco de ahorros presupuestarios y gastos indirectos de la administración pública federal sucede, pese a las prohibiciones explícitas establecidas en las normas de hacienda, contabilidad y gasto público.
“En el Índice de Eficiencia Gubernamental del Banco Mundial de 2022, México ocupó el lugar 114 entre 192 países (en 2012 UNA NUEVA VISIÓN DE FUTURO 16 ocupábamos el lugar 68, una caída de 46 lugares).
“El Índice de Impunidad, elaborado por Eurasia Group y The Chicago Council on Global Affairs, coloca a México entre los países con muy alta impunidad: en el lugar 60 entre 163 países (el lugar número uno lo ocupa el país con mayor impunidad)55. Y Transparencia Internacional, en su Índice de Percepción de la Corrupción de 2022, lo ubica en el lugar 126, el último de la lista en el Grupo de los Veinte (G20), junto con Rusia (mientras que, en 2005, el país se encontraba en el lugar 65, un vertiginoso descenso de 61 lugares)”.
Pero junto a ese diagnóstico contrasta la exultante multitud devoradora del otro diagnóstico, el de la versión oficial, el de los otros datos, como la epopeya descrita el pasado domingo en medio de una sucesión presidencial adelantada en la cual la maquinaria presidencial avanza y aplasta con un viejo tanque por las calles y pueblos de la República.
Pero al parecer ya alguien se ha parado frente al blindado, con aquella célebre fotografía de Jeff Widener de 1989 en la plaza de Tiananmen. Y así se le ha respondido:
“…No es sentencia, ni siquiera advertencia, ni mucho menos amenaza, pero les digo desde el Zócalo, la principal plaza pública de México: poco lograrán si no abandonan su egoísmo y aprenden a respetar y amar a sus semejantes; no llegarán lejos si no comprenden e internalizan que el dinero y lo material es efímero, que la felicidad verdadera está asociada a la bondad y a la fraternidad…”
La bondad… Vaya.