Uno mira las escenas y le cuesta trabajo distinguirlas de aquellas registradas virtualmente en los miles de videojuegos circulantes por el mundo. Como si esa atmósfera polvorienta y gris de un poblacho pedido, Palmarito, Puebla, no fuera sino una escenografía de diseño virtual, como si esas luces mortecinas presagiaran las imágenes por venir.
Un hombre ya abatido resurge de una esquina de la pantalla y tirotea por la espalda a un soldado cuyos tropezones muestran su muerte. Gallina sin cabeza. Cae por fin. Lo han asesinado. La helada cámara registra el homicidio.
En otro momento de la grabación los soldados arrastran por el suelo a jun hombre después de un tiroteo. Parapetados en jun vehículo los delincuentes se lían a tiros con los soldados. Como es obvio, pierden la escaramuza. Los capturan, os someten, los arrastran. Ya sometido uno de ellos, boca abajo en el piso, se queda a solas con un soldado cuya arma le apunta. El tiro apenas se percibe, más se sugiere. El cuerpo salta por el impacto de grueso calibre.
Se ha consumado, al parecer, una ejecución extrajudicial. La helada cámara lo registra.
–Esto es la guerra; dice una mujer horrorizada frente a su televisor. Es la guerra.
Pero hasta en la guerra hay reglas. El asesino del soldado tiene todo un sistema para recibir un juicio justo. El militar cuyo preso fue muerto, no tiene justificación, no importa lo ocurrido antes ni después. Abuso absoluto de autoridad. La sinécdoque del soldado y el Ejército, actúa en contra de la institución La parte define al todo, el todo se confunde con una porción.
Y esa es una generalización absoluta y por tanto inadmisible excepto si se opina (iba a decir si se piensa, pero mejor se opina), como la senadora De la Peña quien dictamina desde su escaño en el Senado: regresen los soldados al cuartel. A todos, como si todos hubieran violado Derechos Humanos.
“La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Angélica de la Peña, advirtió que si se comprueba que lo difundido en el video sobre los hechos ocurridos en Palmarito Tochapan, Puebla, el pasado 3 de mayo durante un enfrentamiento contra los “huachicolero” se trató de una ejecución extrajudicial, el Ejército deberá enfrentar una nueva acusación por una violación grave a los derechos humanos.
“Además —agregó— y se demostrará que las Fuerzas Armadas no deben participar en labores de seguridad o acciones que corresponden a la policía civil.
“Ya existía preocupación por el uso de la fuerza pública de manera excesiva y ahora este video pareciera que nos da la razón”, alertó.
O sea, tirar el agua de la bañera con todo y el niño recién bañado.
Más sensata resulta la posición de la Comisión Nacional de los DH, la cual dice:
“ (Crónica).- Un grupo de especialistas de la CNDH verifican la autenticidad de los videos difundidos este miércoles en los que se ve a un militar asesinando de un tiro en la cabeza a un presunto “huachicolero” durante la operación militar del 3 de mayo en Palmarito Tochapan, Puebla, que dejó 10 muertos.
“El organismo encabezado por Luis Raúl González Pérez abrió un expediente de queja sobre el enfrentamiento donde murieron seis civiles y cuatro soldados, y anunció el envío de visitadores adjuntos para entrevistar a los detenidos y recabar información de lo ocurrido.
“Indicó que ha obtenido información de las carpetas de investigación iniciadas tanto por la PGR como por la Fiscalía General de Justicia de Puebla y además solicitó informes pormenorizados a diversas autoridades.
“Hasta el momento, precisó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en un comunicado, se han integrado al expediente de queja actas circunstanciadas, actuaciones ministeriales y videograbaciones, entre ellas, las que se dieron a conocer en redes sociales donde se da cuenta de parte de lo ocurrido la noche del miércoles 3 de mayo.
“La CNDH aseguró que se practicarán las diligencias necesarias y prometió una investigación detallada, a fin de analizar y valorar todos los elementos que obren en el expediente y hacer el pronunciamiento que corresponda”.
Como sea este video llega en el momento en el cual se refuerza el tema de los Derechos Humanos. Ya están las organizaciones internacionales, en el fácil dictamen sobre la “crisis de los DH” en México, ya se suma todo esto a la publicación de un informe sin metodología confiable, procedente de Londres en el cual se nos coloca a la par de Siria en riesgos para la vida humana.
A fin de cuentas en ese enfrentamiento (en el cual no se justifica lo injustificable), murieron cuatro soldados. Tan humanos como los delincuentes.
Y no falta quien en las vísperas halle pasto para encender en la frontera del año 2018. Todo se asocia todo se suma.