José Ramiro López obrador, Jesús Ramírez Cuevas, “El Fisgón” y Jesusa Rodríguez, no son los mejores ni los peores de los guindas, pero si los amigos del huésped de Palacio Nacional
Como si fueran merecedores a buscar un puesto de elección popular por sus “buenas acciones”, José Ramiro López Obrador, hermano del populista mandatario Andrés Manuel, así como su florero y vocero Jesús Ramírez Cuevas, recibieron la bendición del patrón y huésped de Palacio Nacional para que en una farsa de sorteo al estilo 4T, ganaran un boleto en la rifa del tigre morenita, y según su “buena suerte”, conocida también como “dedazo del patrón”, aunque éste lo niegue, ganaron un lugar para ser candidatos por un lugar en la Cámara de Diputados.
La orden de AMLO fue clara, que sus amigos cercanos, los que le lustran hasta los zapatos y se tienden como alfombras, tengan un lugar en busca de una diputación.
A José Ramiro, de quien no se conoce nada extraordinario que haya hecho por México o su comunidad, y mucho menos de Ramírez Cuevas, que de vocero no cubrió el requisito, ya que toda la función y malabares a la hora del talk show mañanero corrió a cargo de su patrón, se han ganado la oportunidad de buscar un lugar como candidatos a diputados sin merecerlo, ya que el falso sorteo es de todos conocido que la 4T a la hora de los montajes y trucos con sus propios datos, decide quien sí y quien no, según la orden del patrón de Palacio.
A estos dos ilustres personajes se suman los nombres del caricaturista Rafael Barajas ‘El Fisgón’, quien se monta en el carrito de los regalos como lo que es, una vil caricatura que ha sido un florero más para el adorno del patrón. Y no podía falta la exsenadora, Jesusa Rodríguez, y es que no hay para donde buscar, pues son los mismos de siempre y a la sangre nueva la siguen relegando, pero así es esta línea en Morena que actúa al estilo del viejo PRI, pues hay escuela que lo respalda.
Este miércoles, Morena, al estilo de las tómbolas que cada domingo sacaba el actor Xavier López “Chabelo” en su espectáculo coincidentemente también matutino, inició el proceso interno para la selección de sus candidatos al Congreso, y ya el montaje estaba hecho, con supuestas urnas trasparentes, pero con los hombres y mujeres ya definidos.
Los potenciales candidatos no son los mejores ni los peores del partido guinda, pero sí los amigos y serviles del patrón, son los elegidos, y es que su palabra es ley y su decisión inapelable.