Llega diciembre y como anticipo del tronadero de piñatas y como si se tratara de presentar un estruendo real ante el incumplimiento de Miguel Ángel Yunes para cimbrar al país en su toma de protesta, con reveladoras informaciones sobre el desastre financiero y moral del estado de Veracruz; la calma se agita y antes de llegar al puente “Guadalupe Reyes” se nos anuncia quiénes no van a cargar los peregrinos y quien abandonará el crucero antes de cumplirse la segunda mitad del año venidero, mientras los nuevos gobiernos en varios estados, se aproximan a un límite de desfiladero.
Agustín Carstens, gobernador del Banco de México les dice, a quienes deben oírlo, sobre su salida del Banco Central en julio del año venidero y su sola palabra revienta, como piñata, otra vez, la cotización del peso y lo manda casi a los 22 por dólar, lo cual no es un catarrito de los suyos, sino un desastre de aquellos, cuya explicación resultaría peor: Carstens se va antes de una tormenta perfecta, ya anunciada por medio mundo, sin darse cuenta, quizá, como su decisión agrava los vientos y fortalece los diluvios bíblicos de una crisis de magnitud imprevisible.
Pero no solo es en el disciplinado y discreto (a veces) sector financiero donde se mueve el sismógrafo, también en los medios de comunicación se sacuden los tapetes y en medio de una purga de dimensiones estalinistas, la escoba barre con medio mundo en Chapultepec 18 sin conocerse de fondo ninguna explicación satisfactoria. Veamos.
Joaquín López Dóriga, sin duda el más experimentado y profesional de sus periodistas, sale del aire. No se sabe a dónde va. Tampoco se conocen los proyectos de Víctor Trujillo, “Brozo”, quien sufre una más de sus caídas dentro de la empresa. La primera fue cuando formó parte de la exhibición de los sobornos de Carlos Ahumada a René Bejarano en plena efervescencia de la violencia electoral hace casi una década y otra cuando fue removido del horario matutino cotidiano en Foro TV por las mañanas, hace apenas unos meses.
Adela Micha, quien era pieza central de Grupo Imagen, con un noticiario radiofónico de considerable audiencia, deja esta empresa, la cual lo anuncia con un comedido desplegado de infructuosa cortesía, y su programa de entrevistas en Televisa, pasa también a reinar en los amplios campos del olvido, como también una cosa indefinible llamada “Si me dicen no vengo”.
Cesan sus funciones “Los alebrijes”, quien lo diría, en la misma fecha cuando Carstens, su convidado frecuente, decide saltar por la borda de un barco a punto del naufragio.
Se van los periodistas pero la función continúa y quienes permanecen duermen desde ayer con un ojo abierto, como hacen el solitario caimán o el sicario con la pistola debajo de la almohada.
Pero unos salen y otros entran y al llegar a sus Palacios de Gobierno los nuevos mandatarios, al menos de Veracruz y Oaxaca, donde nada hay de palaciego en esos edificios carcomidos por la incuria, el bloqueo, el saqueo y la penuria y se encuentran con el desastre en todo su esplendor y todos los carruajes convertidos en calabacines y ya se apresura Alejandro Murat a decir, me han dejado una Oaxaca en colapso total y el desastre se presenta con la eterna ingobernabilidad del viejo marquesado, pues hasta la toma de protesta se convierte en un sainete del cual sale medianamente bien librado gracias a las sombras de la noche.
Vea usted:
“Esta madrugada, Alejandro Murat Hinojosa rindió protesta ante el Congreso de Oaxaca como gobernador para el periodo 2016-2022. Murat fue acompañado por los gobernadores de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, y de Yucatán, Rolando Zapata Bello; por el presidente del Senado, Pablo Escudero Morales; el coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en el Senado, Emilio Gamboa Patrón; los senadores Roberto Gil Zuarth y Eviel Pérez Magaña, así como por los ex gobernadores de Oaxaca Heladio Ramírez López y José Murat Casab.
“Asimismo, por el presidente del CEN del PRI, Enrique Ochoa Reza. Alejandro Murat tuvo que rendir protesta en las instalaciones de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión del Gobierno del Estado de Oaxaca, debido a los bloqueos de la CNTE y la CTM”.
En fin, una toma de posesión en los estudios de la TV oficial, mientras en las otras televisoras se vive en una especie de pánico silencioso.
Nadie sabe, nadie supo, pero el miedo se corta con navajas y no son únicamente los conductores quienes se marchan sino sus equipos, sus asistentes, sus productores, sus compañeros.
¡Entren santos peregrinos, peregrinos!
¿Quién sigue?