«La más reciente aplicación de esta evaluación en nuestro país ocurrió en el contexto mundial de la etapa final de la emergencia sanitaria por Covid-19”, apunta la Secretaría de Educación Pública
Sin argumentos sólidos que ayuden a explicar las causas por las que el sistema de enseñanza en México en la administración de la Cuarta Transformación ha dado pésimos resultados, como reveló la prueba del Programa Internacional para el Seguimiento de los Alumnos (PISA) 2022 entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y publicado el martes 5 de diciembre, este miércoles la Secretaría de Educación Pública (SEP), cuya titular es Leticia Ramírez Amaya, encontró como culpable de ese retroceso en la enseñanza en el país a la pandemia de Covid-19.
A través de un comunicado, la SEP destacó que «la más reciente aplicación de esta evaluación en nuestro país ocurrió en el contexto mundial de la etapa final de la emergencia sanitaria por Covid-19; todos los países enfrentaron de manera diferenciada esta terrible circunstancia».
La dependencia, que no encontró mejores argumentos para reconocer que no hay un plan de estudios adecuado y donde la materia de matemáticas es una de las asignaturas que menos interesa a la 4T, expuso que «en el contexto en que fue realizada esta evaluación, los esfuerzos realizados por las y los adolescentes y docentes reflejan la adaptabilidad de nuestro sistema educativo frente a circunstancias inusuales».
La Secretaría de Educación Pública refiere que el gobierno del populista Andrés Manuel López Obrador diseñó estrategias de atención para privilegiar la seguridad y el interés superior de las y los estudiantes, y una vez que se superó la contingencia por Covid-19, se realizaron esfuerzos para asegurar el regreso a las aulas de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, y lo conseguimos: se recuperó el 100 por ciento de la matrícula.
«Es necesario realizar un análisis considerando el contexto de los resultados de estas pruebas, como las condiciones socioeconómicas y culturales de cada país para evitar interpretaciones reduccionistas», apuntó.
En la misma línea, la SEP señala que los resultados que dio a conocer PISA no demuestran cambios significativos respecto a las ediciones anteriores de esta evaluación. Nuestros estudiantes presentan retos en las 3 áreas evaluadas: matemáticas, español y ciencias, lo que confirma que era necesario un cambio en el modelo educativo, situación que se agravó por la emergencia sanitaria.
Mencionó que la prueba aplicada en los meses de abril y mayo de 2022 es una prueba estandarizada que tiene como propósito medir a través de preguntas, la formación de estudiantes de 15 años, y que las pruebas internacionales estandarizadas no consideran las condiciones reales en las que se desarrolla el trabajo docente, así como los procesos situados de la enseñanza y los aprendizajes en las aulas de los distintos países.