El mamífero estuvo varios días en aislamiento tras su llegada a este parque de conservación, donde ahora convive con seis adultos y una cría de meses de nacida de su misma especie

No pasó ni una semana para que comenzara la adaptación de la jirafa Benito al clima de Puebla, luego de llegar de un ambiente gélido en Chihuahua, y la prueba de fuego para integrarse a su nueva familia, en la manada se registró este sábado en el zoológico Africam Safari, donde la bienvenida fue de la mejor manera, con un pastel de zanahoria que el ejemplar compartió con sus nuevos amigos de especie.

Benito estuvo varios días en aislamiento tras su llegada a este parque de conservación, donde lo esperaban seis adultos y una cría de meses de nacida.

Este enorme mamífero en un primer momento se sintió extraño al observar a las otras jirafas, se acercó al primer grupo, revisó el área y retrocedió debido a que estaba conociendo el lugar y guardaba distancia de su nueva familia.

Sin embargo, fue impulsado a acercarse al segundo grupo de jirafas donde tenían un pastel hecho de zanahorias y manzanas, a donde se acercó sin dudarlo y comenzó a comer y compartir con las demás jirafas.

CURIOSO

Este ejemplar se mostró pacífico y curioso de su nuevo entorno, por lo que comenzó a olfatear y tocar a los demás, para saber quiénes formarán parte de su estancia actual.

Frank Carlos Camacho, director general de Africam Safari, señaló que Benito tendrá una vida de calidad por lo menos en los próximos 20 años, donde buscarán reproducir la especie y conservarla ante la amenaza de extinción que tienen las jirafas.

“Benito llegó hace apenas tres días, en este tiempo hemos trabajado para cambiarlo de alimentación que es muy importante para nosotros, hemos trabajado para que conozca el entorno y otras especies de animales como antílopes, avestruces, impalas, y otras especies, lo hemos visto muy cómodo, quisimos que su transición fuera gradual”, apuntó.

Refirió que hoy (sábado) por la mañana se metió al grupo de jirafas con el rebaño familiar.

“Nos preocupaba una de las crías, que la fuera atropellar o que fuera a interactuar de manera brusca, porque apenas está aprendiendo a ‘ser jirafa’, y no pasó, fue al contrario, fue una introducción perfecta”, apuntó.

ANTECEDENTE

Benito estaba retenido desde mayo pasado en el Parque Central de Ciudad Juárez, en Chihuahua, que se negaba a trasladar a la jirafa a su nueva casa, a pesar de que vivía con apenas un techo y una construcción de concreto y lámina, donde en los últimos días soportaba temperaturas de hasta 10 grados bajo cero.

Esta situación derivó en que algunas agrupaciones ambientales bajo el colectivo ‘Salvemos a Benito’ obtuvieron una orden judicial para su traslado, por lo que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales intervino para que la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, tomara la mejor decisión para la jirafa Benito. Finalmente, el mamífero fue trasladada de Ciudad Juárez a Puebla en un viaje de más de 30 horas y casi 2,000 kilómetros para llegar a su nueva casa y con su nueva familia.