De un tiempo a esta época nos hemos ido convirtiendo, muy en estilo estadunidense, en un país de chismosos y delatores. Podemos acusar a quien sea de cuanto nos venga en gana, pues de esa manera se ha distorsionado el libre ejercicio de la opinión.

En el nombre de la libertad de expresión todos somos Cicerón y todo panfleto una catilinaria.

La causa en nombre de la cual se busca perseguir a deshonestos y malvados, es la honestidad. Todos somos honestos, todos somos virtuosos, especialmente si gritamos contra la corrupción desde las tribunas de la sociedad civil organizada en sociedades de todo tipo.

¡Al ladrón, al ladrón!, gritan algunos.

Como todos sabemos los auto designados custodios de la moralidad nacional, son incorruptibles. Sus especialistas e inquisidores (inquieren sobre conductas y patrimonios) no son sólo empresarios decentes sino empleados de negociantes y capitalistas ejemplares. Ellos no conocen el pecado.

“…el verdadero remedio de todos estos males  de todos estos males –dice José Toribio Medina en “Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisición en México” (Conaculta.1991)–, consiste en desviar y excluir del todo la comunicación de las personas heréticas y sospechosas en la doctrina de nuestra santa fe católica , castigando y extirpando sus errores y herejías…”

Hoy las cosas son muy distintas. No se hacen autos de fe, pero se siguen alzando hogueras por aquí y por allá, no bajo el signo de la cruz redentora sino de la transparencia, la rendición de cuentas, las declaraciones diversas cuyo resultado es no solo exhibir sino inhibir a los funcionarios públicos.

En ese sentido los cazadores de brujas han puesto en la mira de sus armas al director general de CAPUFE, Benito Neme, quien además de sus pecados administrativos (si los tiene), agrava su condición con una amistad peligrosa. Es muy cercano al Presidente Enrique Peña, lo cual en estos días suele ser un riesgo adicional.

Como todos sabemos en 2015 se licitó el servicio de peaje automático en las carreteras administradas por este organismo. Se trataba, dijeron entonces, de uniformar estos servicios en todas las carreteras de pago del país, incluidas las autopistas urbanas. Y como sucede cundo alguien no tiene un contrato: otros se quedan con las ganas o pierden lo ganado hasta entonces. Y chillan y compran coros.

La Secretaría de la Función Pública conoció esa licitación. La superviso y decidió (ella) reservar parte de los datos durante tres años. Hoy se achaca esa reserva a las no declaradas ambiciones políticas del director de Capufe, Benito Neme, cuya oficina envió esta declaración sobre el asunto:

“En atención a las recientes publicaciones en cuanto a la reserva de la información solicitada por la organización “Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad”, relativa al procedimiento de la licitación pública para la contratación de un proveedor para la operación del sistema de “Telepeaje” de Caminos y Puentes Federales,  se hacen las siguientes precisiones:

“La Secretaría de la Función Pública,  a través de la Unidad de  Auditoria Gubernamental, reservó por un periodo de 3 años, a partir del 1° de diciembre de 2015, la auditoría No. 32 realizada al Procedimiento de Licitación del Sistema de Telepeaje de CAPUFE, tal como aparece en el Sistema de Índices de Expedientes Reservados que se encuentra publicado en el Portal de la Administración Pública Federal del Instituto Nacional de Transparencia,  Acceso a la Información y Protección de Datos Personales.

“En este contexto, CAPUFE está impedido legalmente para la entrega de cualquier documentación sobre ese tema.

“Los servidores públicos de CAPUFE en los actos que ejecutan son respetuosos de la legalidad y la transparencia, a la vez que acatan en todo momento las decisiones de las autoridades competentes”.

Hasta ahora no sabemos si CAPUFE es una autoridad competente o incompetente, sobre todo si revisamos el paso por esas oficinas del defenestrado Virgilio Andrade cuya gestión pasó de lo hilarante a lo cesante. Pero sea como sea, la SEFUPU tiene la capacidad legal de reservar la información, justa o injustamente, así se entripen los mexicanos contra la corrupción y sus voceros.

CHAMULA

El enfrentamiento entre maestros inconformes e indígenas chamulas hace un par de días, nos lleva a recordar a esta etnia en las palabras del maestro Ricardo Pozas:

“…(tienen) Concepto individualista, extremado de la propiedad. Conciencia de colectividad limitada al grupo étnico. Tratan como gente extraña a los indios de otros pueblos y con desconfianza a quienes no son indios.

“(acusan)… Deseo de servir en los puestos públicos sin remuneración… (tienen) temor de la venganza de los hombres y de los espíritus… (son) celosos en el cumplimiento de la palabra o el juramento hecho…”

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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