La Secretaría del Medio Ambiente del GCDMX informó que la capital del país se integra a AirNow Internacional, plataforma que permite intercambiar datos en tiempo real sobre la calidad del aire.
En el marco del Foro “Geoespacial Latinoamericano” que se desarrolla en la Ciudad de México, la Comisión para la Cooperación Ambiental de América del Norte y el Instituto Nacional de Ecología y el Cambio Climático, anunciaron esta integración.
Con esto la CDMX se convierte en la más grande de América del Norte en intercambiar esta información en tiempo real a través de la plataforma ANI.
La titular de la Sedema, Tanya Müller, destacó «la satisfacción ser la metrópoli considerada para esta actividad y aseguró que los datos de monitoreo atmosférico que registramos en tiempo real, contribuyen no sólo a impulsar el desarrollo tecnológico regional, sino avanzar en la investigación que se traducen en políticas públicas orientadas a mejorar la calidad del aire. “La Ciudad de México es la primera que comparte sus datos en tiempo real en la plataforma AirNow-Tech”.
AirNow, es una herramienta a nivel internacional que proporciona información confiable sobre la calidad del aire. Este proyecto se ha ejecutado en estrecha coordinación con los organismos de protección del medio ambiente de Canadá, Estados Unidos y México, así como la Red de Monitoreo de Calidad del Aire de la Ciudad de México, mejorando las maneras de informar a los ciudadanos sobre este aspecto.
En los últimos 10 años la Red de Monitoreo de Calidad del Aire de la Ciudad de México ha implementado un programa de control y aseguramiento de la calidad, similar al recomendado por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos. En este periodo se han invertido más de 20 millones de pesos en la adquisición de equipos de calibración, tiempo y recursos humanos para garantizar la calidad y oportunidad de la información.
El Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México cuenta con una infraestructura única en América Latina para el estudio de la contaminación. Además de proporcionar información continua a la ciudadanía, permitirá contribuir al diseño de mejores políticas públicas para la mejora de la calidad del aire de la Ciudad y seguimiento de las políticas actuales.
Nuestra infraestructura, concluyó Tanya Müller, tiene un costo superior a los 100 millones de pesos y da servicio no sólo a la Ciudad de México, sino a toda la zona conurbada del Estado de México.