Corresponderá a la empresa Ferrocarriles Suburbanos colocar toda la vía, cambiar los rieles obsoletos, así como instalar las señalizaciones, comunicaciones en cada estación intermedia, boletaje o uso de tarjetas de acceso, catenarias y todo el complemento que la infraestructura

La falta de los permisos para adquisición de los terreno por donde cruzará la ampliación del Tren Suburbano que conectará la estación Lechería con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), a lo que se suma la falta de trabajadores para acelerar los trabajos frenaron que en diciembre de este año la anhelada inauguración de este servicio se haga realidad, como había prometido el populista mandatario Andrés Manuel López Obrador, por lo que especialistas en infraestructura y movilidad advierten que si no surgen inconvenientes, esta obra podría estar lista hasta junio del 2024.

Fechas van y vienen sobre el avance y culminación de lo que será la ampliación servicio del Tren Suburbano con enlace desde Lechería hasta el aeropuerto de la base militar de Santa Lucía, pero la realidad es que dependerá de que no se agote el presupuesto destinado a la obra y se cumpla con el trazado del proyecto.

El pasado 21 de abril el secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SITC), Jorge Nuño, emocionado porque estaba ante el mandatario en Palacio Nacional, se aventuró a decir que en diciembre próximo la conectividad férrea desde Buena Vista al AIFA quedará lista según lo programado, aunque no dio fecha para la puesta en marcha y su inauguración.

Sin embargo, el subsecretario de la SICT, Felipe Verdugo, dijo que el servicio del Tren Suburbano hasta Santa Lucía estaría en condiciones de ofrecer el servicio en abril del 2024, lo que todavía no puede darse por hecho, ya que de los 23 kilómetros de longitud del enlace entre Lechería y el AIFA solo están concluidos los 8 kilómetros que la secretaría de la defensa Nacional (Sedena) entregó junto con la estación Terminal, el día que se inauguró el aeropuerto de Tecámac, el 21 de marzo de 2021.

El funcionario refirió que actualmente se trabaja sobre diferentes tramos de vía, sin especificar las obras que se realizan.

AMPLIACIÓN

La ampliación del Tren Suburbano desde donde será el entronque de Lechería para llegar hasta el aeropuerto Felipe Ángeles, de acuerdo con la SICT, lleva un avance del 34 por ciento. En Total, se estima que el recorrido desde Buenavista al AIFA tendrá 42 kilómetros que cubrirá en un tiempo de 39 minutos.

El subsecretario de Comunicaciones y Transportes justificó los atrasos que lleva la obra por supuestas invasiones en los derechos de vía, además de que no se contaba con la propiedad o permisos para construir en terrenos ejidales por donde cruzará el tren y que comprende áreas de los municipios de Tultitlán, Tultepec y Nextlalpan.

Para no encontrar pretexto alguno y las obras se aceleren para inyectar algo de vida al desangelado aeropuerto de Santa Lucía, López Obrador firmó un decreto que se publicó el pasado 22 de mayo en el Diario Oficial de la Federación (DOF), en el que se procede a la expropiación de más de 11 hectáreas de terreno ejidal.

EXPROPIACIÓN

De acuerdo con el Diario Oficial de la Federación, la expropiación de los terrenos tiene carácter inmediato y comprende una extensión de 113 mil 838.5053 metros cuadrados que se ubican en los citados municipios mexiquenses.

El documento subraya que los terrenos ejidales se utilizarán para construir los que serán los Centros de Transferencia Modal 1, 3, 4 y 6 de la línea 1 del Tren Suburbano y que conectará con el AIFA

Los terrenos expropiados cruzan en línea recta y aunque ya existen las vías que serán reutilizadas para el Tren Suburbano, falta que se lleven a cabo trabajos de retiro de rieles y sustituirlos por unos nuevos, estudios de impacto y acoplamiento del terreno, fuerza de la superficie y sitios donde se deberá sustituir el balasto (piedra que se utiliza para que se asiente la vía del tren).

A esta situación se sumaron inconformidades de vecinos del municipio de las colonias Ejidos de Teyahualco, 10 de Junio, Caxija y Barrio la Manzana, del municipio de Tultepec, así como habitantes de la colonia San Pablo de las Salinas, en Tultitlán, que rechazan que esta obra se lleve a cabo, ya que argumentan que el Tren Suburbano afectará la movilidad de los pocos más de 20 mil habitantes de la zona, además de que le quitará la esencia y tradiciones de pueblo que aún conservan.

PRESUPUESTO

Sin embargo, una de las opciones que dieron a las autoridades del Gobierno Federal es que el tramo que cruce por sus comunidades sea elevado, lo que ha sido rechazado por las autoridades, toda vez que cambiaría el proyecto, el costo se duplicaría y retrasaría por más tiempo la inauguración del servicio.

Hasta el momento el único avance que lleva la obra es la ampliación de infraestructura de 8 kilómetros terminados en la estación terminal del AIFA, mientras que Ferrocarriles Suburbanos trabaja sobre lo que denomina vía B en la terminal Buenavista, y que será la vía exclusiva de donde saldrán los trenes con dirección hacia el Aeropuerto Felipe Ángeles.

En lo que respecta a las seis estaciones intermedias que tendrá la interconexión desde Lechería y que serán Cueyamil, Teyahualco, Los Agaves, Prados Sur, Nextlalpan y Jaltocan solo está el trazado sin avance en la construcción, por lo que de acuerdo con especialistas en obras de movilidad e infraestructura, la interconexión desde Lechería al AIFA llevará al menos un año para su entrega, ya que además de los inmuebles concluidos se deberán hacer estudios y pruebas de la operatividad de trayectos para corregir posibles fallas sobre el terreno, no sólo en vías, sino en la conectividad y trazado de la electricidad, que es como opera este medio de transporte.

Además, corresponderá a la empresa Ferrocarriles Suburbanos colocar toda la vía, cambiar los rieles obsoletos, así como instalar las señalizaciones, comunicaciones en cada estación intermedia, boletaje o uso de tarjetas de acceso, catenarias y todo el complemento que la infraestructura demanda en cada una de sus estaciones e instalaciones.

Sobre el reparto de presupuesto para esta obra que se estima en 25 mil 800 millones de pesos, 15 mil millones corresponden a la empresa concesionaria Ferrocarriles Suburbanos S.A., lo que representa el 60 por ciento. El Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) inyectará 5 mil millones de pesos para este proyecto a través de un crédito del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) y el restante será aportado por la SICT.