De los más de 12 millones de potenciales votantes, solo acudieron a las urnas 4 de cada 10 personas, es decir, que un poco más del 40 por ciento
El abstencionismo se impuso en la elección por la gubernatura del Estado de México, y de acuerdo con el censo de ciudadanos mexiquenses con derecho al voto, de los más de 12 millones de potenciales votantes, solo acudieron a las urnas 4 de cada 10 personas, es decir, que un poco más del 40 por ciento cumplió con su derecho cívico, mientras que más del 50 por ciento no encontró una buena oferta política entre las dos candidatas, Delfina Gómez, la virtual triunfadora de “Juntos haremos historia”, y Alejandra del Moral, por “Va por el Estado de México.
Especialistas esperaban que la jornada de este 4 de junio fuera copiosa y que hubiera largas filas en las casillas de los 125 municipios, pero la realidad fue otra, los electores brillaron por su ausencia y mostraron indiferencia ante las dos candidatas que no tenían el ángel esperado por los electores.
Algunas casillas lucieron semivacías y otras se veían con una importante asistencia, pero se trataba de los representantes de los partidos participantes, más no de los votantes.
De los más de 12 millones de electores que se esperaban en las urnas, poco más de 4 millones lo hicieron, lo que refleja el desinterés que aumenta las elecciones que no pasan de ser más de lo mismo, sin propuestas reales para gobernar y donde los ganadores reciben la estafeta del gobierno saliente pero sin cambios que realmente beneficien a la ciudadanía, lo que ha quedado asentado en esta desangelada contienda.
Habrá que ver si el efecto espejo del abstencionismo se presenta en las elecciones presidenciales del 2024, donde la mano del huésped de Palacio Nacional ya comenzó en favor de sus candidatos de la 4T, mientras que la oposición sin una carta fuerte ya puede darse por noqueada desde ahora.