Las organizaciones internacionales tienen algo en común: se corrompen. No importa si se trata de la FIFA, el Comité Olímpico o cualquiera otra. Promotores de espectáculos, a fin de cuentas, tienen  en general la misma mentalidad: las ganancias por encima de cualquier otro idea, símbolo o labor humanitaria y les venden su mercancía distractora y legendaria a los únicos capaces de comprar semejantes circos: los gobiernos de cualquier país del mundo.

El circo, en sus manos,  tiene la misma finalidad de toda la historia: distraer, entretener, adormecer y retirar a las masas de la fea realidad –donde viven las frustraciones verdaderas, las quejas sinceras, la rebelión política y demás–, e introducirla a un mundo ideal de marcas, marcadores, records insuperables, atletas poderosos e invencibles, deidades al alcance de la mano, en el cual se supone cualquier mortal pueden convivir con los dioses de los estadios.

La Carta Olímpica,  las declaraciones de pureza deportiva y otras zarandajas de ese calibre no son sino invocaciones de algo inexistente: la perfección humana a través del deporte, la concordia de la humanidad, la fraternidad. En muchos casos el deporte también está podrido.

Y no podría ser de otra manera: si es obra humana y como dijo Nietzche; lo humano nos aleja de la divinidad; o sea, de la pureza, si se considera la verdad teológica de un solo ser perfecto: el creador hasta de lo imperfecto.

Pero más allá de lucubraciones filosóficas, la FIFA, cuyo pasado es un  estercolero, necesita un barniz de respetabilidad y una vez sustituidos los pandilleros de Blatter y demás, la nueva cara de los futbolistas asociados busca limpieza, ejemplaridad y adhesión a las buenas causas, y como en algún momento enarbola una de las banderas de moda en el globalizado mundo de la hipocresía humanista: el respeto a los Derechos Humanos como requisito para organizar un campeonato mundial de futbol.

Al menos esa exigencia se ha dejado ver en el reciente congreso efectuado en México porque la FIFA ha contratado a un santón de estos temas quien ha hecho esto publicado en la página de la Federación. Vea usted:

“El informe independiente redactado por John Ruggie, experto en derechos humanos y profesor de la Kennedy School de la Universidad de Harvard, publicado el jueves 1 de abril de 2016 ayudará a la FIFA a fortalecer su enfoque institucional en materia de derechos humanos, lo que incluye el desarrollo paulatino de una «política de derechos humanos de la FIFA»…

“…La futura política de derechos humanos de la FIFA, que se aplicará a todas sus actividades, estará a disposición del público e incluirá la interpretación adecuada del artículo 3 de los Estatutos de la FIFA y las expectativas que la organización tiene respecto a sus grupos de interés en materia de derechos humanos. El objetivo de la FIFA a medio plazo es disponer procesos adecuados de conformidad con las normativas internacionales que permitan evaluar los posibles riesgos para los derechos humanos en relación con sus actividades, así como mecanismos de mitigación o reacción”.

«La FIFA se ha comprometido sin reservas a respetar los derechos humanos», ha declarado Gianni Infantino, presidente de la organización.

«Agradezco sinceramente al Prof. Ruggie que haya elaborado este informe, que, junto con la labor continua y el análisis de la propia FIFA, guiará nuestra estrategia. Se trata de un proceso continuo y, por supuesto, quedarán cuestiones pendientes, pero la FIFA está comprometida a cumplir con su parte para garantizar el respeto a los derechos humanos y ser una pionera entre las organizaciones deportivas internacionales en esta área tan importante».

Obviamente el profesor Ruggie debe ser un magnifico vendedor, pues el camelo de imponerle a una asociación de federaciones deportivas una condición de autoridad responsable (como si fuera una autoridad política) por la observancia y vigencia de los Derechos Humanos, debe haber significado un contrato sumamente costoso.

CHIHUAHUA

Galopa en el caballo de la hacienda el candidato del PRI en Chihuahua, Enrique Serrano. De acuerdo con las recientes encuestas goza del 43 por ciento en las preferencias electorales, mientras Javier Corral se rezaga con el 29. 7 por ciento.

Y en cuanto al escenario electoral general los datos son casi iguales. Por cuanto hace a sus Positivos y negativos, Serrano tienen 49 por ciento de reconocimiento, contra 32 por ciento de señalamientos adversos. En el caso de Corral, sus por y sus contra montan a 39 y 32, respectivamente.

En cuanto a la credibilidad el 43.2 por ciento de los encuestados dice creerle a Serrano mientras a Corral sólo le creen 29 por ciento de los votantes.

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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