Este es el quinto conjunto de sanciones contra organizaciones criminales transnacionales en el último mes

En un esfuerzo por frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos, el Departamento del Tesoro sancionó este martes a dos líderes del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y a dos empresas vinculadas a ellos. Esta acción subraya el compromiso del gobierno de Joe Biden en la lucha contra la epidemia de opioides que ha causado más de 100 mil muertes por sobredosis anualmente en el país.

Los sancionados, Juan Carlos Bañuelos Ramírez y Gerardo Rivera Ibarra, son acusados de liderar células del CJNG dedicadas al tráfico de fentanilo y metanfetaminas hacia Estados Unidos. Según el comunicado del Departamento del Tesoro, Bañuelos, conocido como «El Pistones», está involucrado en la compra de precursores químicos, producción de metanfetaminas y adquisición de armas automáticas y drones para el cartel. Rivera Ibarra, alias «El Compadre», coordina el suministro de fentanilo, metanfetaminas y cocaína, manteniendo contacto directo con altos mandos del CJNG.

Además de estos individuos, las sanciones se extendieron a dos empresas mexicanas: Fornely Lab S.A. de C.V., vinculada a Rivera Ibarra, e Inmobiliaria Universal Deja Vu S.A. de C.V., asociada a Bañuelos. Estas compañías son acusadas de facilitar operaciones de lavado de dinero y otras actividades ilegales del cartel.

Las sanciones, coordinadas con el gobierno de México, implican el bloqueo de todos los bienes y participaciones en bienes de los sancionados que se encuentren en Estados Unidos o bajo control de ciudadanos estadounidenses. Brian E. Nelson, subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, destacó la importancia de las sólidas alianzas entre ambos países para desmantelar las finanzas del CJNG y otras organizaciones criminales.

Este es el quinto conjunto de sanciones implementado en el último mes por la administración Biden-Harris contra organizaciones criminales transnacionales, subrayando la determinación del gobierno estadounidense en combatir el tráfico ilícito de drogas. Nelson enfatizó que, a través de estas acciones, Estados Unidos continuará actuando para proteger a sus ciudadanos del devastador impacto del tráfico de fentanilo.

Las sanciones reflejan un enfoque integral que no solo apunta a los traficantes de drogas, sino también a las estructuras financieras que sustentan sus operaciones. Con el apoyo de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de México y agencias estadounidenses como la DEA y la Fiscalía para el Distrito Central de California, las autoridades esperan cortar los flujos financieros que alimentan la producción y distribución de drogas sintéticas.

La presión sobre el CJNG, uno de los mayores productores y traficantes de fentanilo, es un paso crucial en la lucha contra la epidemia de sobredosis que sigue cobrando miles de vidas en Estados Unidos.