Desde hace dos semanas no ha pasado día sin que el mandatario no mencione o critique a la panista, quien lo acusa de machista por el tono burlón y despectivo como se dirige a ella
Enfrascados en una guerra de reclamos y acusaciones, la senadora Xóchitl Gálvez, quien se perfila por ahora como la imagen visible de la oposición para ser la candidata del Frente Amplio por México para la Presidencia de la República, no se ha hecho menos ante los comentarios burlones y machistas que le ha lanzado el populista presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en uno de sus talk show en Palacio Nacional recordó en tono de mofa la época en la que la legisladora siendo niña vendió tamales con una de sus tías, oficio que ella con orgullo enalteció y en respuesta al mandatario le subrayó: “Mejor vender tamales que dar atole con el dedo”, en alusión a los discursos que plagados de mentiras y falsas promesas que todas las mañanas pronuncia el máximo líder de la 4T desde el púlpito de Palacio.
Este toma y daca entre Xóchitl Gálvez y López Obrador lleva más de dos semanas, siendo el principal incitador de los ataques contra la panista el propio mandatario, quien se ha convertido en su principal promotor al no dejar pasar ni un solo día sin que la mencione o critique, ya sea por su forma de vestir, por viajar en bicicleta o por ser la supuesta elegida del bloque conservador.
El intercambio de reclamos ya rebasó las redes sociales, los mensajes radiofónicos y televisivos y alcanzó los anuncios espectaculares donde ya aparecen imágenes de Xóchitl y AMLO como los protagonistas, opacando incluso las precampañas de las “corcholatas” de la 4T, que han pasado a un tercer plano, ya que los personajes del momento son la senadora panista y el presidente.
Un gigantesco anuncio que no pasa inadvertido exhibe a manera de lección, la respuesta que le da la senadora a López Obrador, a quien lo muestra como un machista y un mentiroso que todas las mañanas se aferra a su púlpito en la sede presidencial para soltar su acostumbrada retórica de lo que él quiere que todos escuchen y con la que pretende engañar a todo mundo con sus mensajes facciosos.
Este espectacular tiene en su contexto la conferencia mañanera del pasado 7 de julio, en la que López Obrador fue interrogado sobre si tenía miedo del gran crecimiento que Xóchitl Gálvez ha tenido en los últimos meses entre las preferencias de potenciales votantes, a lo que el mandatario respondió burlón y en tono despectivo que “cómo, a ver, me subo a una bicicleta o llego en un triciclo; ‘tamales, tamales, ricos tamales’ y ya. O digo unas groserías. Es que apenas ganó una elección y eso en las Lomas, pero, con todo respeto, México no es las Lomas”, expresó el mandatario, quien hizo a un lado el respeto a la senadora y toda humildad, si es que en algún momento la ha tenido.