Miles de personas invadieron el domingo las calles de varias urbes de esta nación para exigir ¡libertad!, en una movilización en la que a manera de denuncia reclamaron al represor Miguel Díaz Canel resuelva los problemas de falta de comida, fin a la miseria y cortes prolongados de electricidad
El régimen dictatorial de Miguel Díaz Canel se enfrentó el pasado domingo a una movilización que congregó a miles de cubanos en varias urbes de la isla que en una sola voz clamaban solución a los problemas de falta de comida, fin a la miseria y solución a los constantes apagones que se han prolongado hasta por más de 16 horas.
“La gente aquí en Santiago [de Cuba] cogió las calles por cuestión del descontento social, porque no hay comida, por los apagones de hasta 16 horas. Cada dieciséis horas sólo te ponen tres horas de luz. Y las personas ya no dan más con hambre, con miseria, con apagón y sin agua”, relató a la cadena Telemundo Evelyn Suñe, una opositora cubana que vive en esa provincia en el este de la isla.
Miles de cubanos salieron a las calles el domingo en la provincia oriental y en otras urbes a lo largo de la isla para manifestarse pacíficamente, luego de varios días de cortes en el servicio eléctrico ―de hasta 20 horas en algunas localidades―, y meses de escasez de alimentos, medicinas, combustible y otros insumos básicos.
Las protestas, que son una rareza en una Cuba donde el poder suele sofocar con rapidez cualquier reclamo público, son las más numerosas desde que el 11 de julio de 2021 miles de cubanos de toda la isla tomaro las calles al grito de “¡Qyeremos libertad!”. Cientos de manifestantes fueron detenidos, y muchos de ellos condenados en juicios sumarios por delitos comunes.
“El problema es que el hambre es más grande que el miedo”, dijo Suñe, quien aseguró que las autoridades santiagueras desplegaron agentes en las calles y militarizaron los barrios donde estallaron las protestas. “Yo digo que el pueblo ya despertó y esto no va a parar. Esto ocurrió ayer y va a seguir”.
Muchos manifestantes, en especial mujeres con niños, coreaban en Santiago de Cuba la frase “¡Corriente y comida!”, según videos grabados por manifestantes y publicados en redes sociales antes de que el servicio de internet fuera suspendido durante horas, según denuncias desde la isla.
La protesta inicial estalló en un barrio popular en el centro de Santiago de Cuba, a unos 800 kilómetros de La Habana, la capital de Cuba. Horas después se produjeron reportes de otras manifestaciones en el Cobre, en la misma provincia; en Bayamo, en la provincia oriental de Granma; y en Santa Marta, Matanzas, donde se localiza la turística playa Varadero.