Lo más notable de la reforma fiscal, hacendaria o como se le quiera llamar residen en sus faltantes.

El fantasma del Impuesto al Valor Agregado en los alimentos y las medicinas, pretexto inatacable para golpear a cualquier gobierno cuya osadía llegue hasta ese extremo, se desvaneció como los espíritus: basta con no creer en ellos. El gobierno construyó una propuesta alternativa en cuya paternidad y origen ahora tenemos una discusión.

–¿El IVA a los alimentos y las medicinas, terrible golpe a la economía popular fue desechado por sensibilidad, por cálculo político, por inviabilidad técnica o por temor?

Cada quien hallará en la pregunta su propia respuesta, pero para los “morenos” hay un hecho incontestable: el IVA no pasó.

–¿Pero ni siquiera fue presentado?

–No lo presentaron para evitarse el alzamiento al cual íbamos a convocar; es la respuesta entre suspiros de orgullo.

Los más cercanos a la iniciativa dicen: nunca estuvo siquiera contemplado como alternativa única. Tal ha dicho el diputado Jorge Herrera Delgado, presidente de la Comisión de Hacienda (Antena radio; Julieta Mendoza, Enrique Lazcano) el presiente estuvo consciente de la situación económica nacional.

Y quizá haya razón: no se ve mucho la, lógica en un país donde el mismo gobierno reconoce el hambre de millones y por su redención despliega una cruzada nacional como un eje importante de su actividad, y después les cobra a los mismos muertos de hambre por la osadía de atreverse a comprar la escasa pitanza de su famélica circunstancia.

Pero una reforma no puede quedarse en las simples cifras de la recaudación. La cantaleta de nuestra dispareja relación con Los países de la OCDE (un puñado de tecnócratas con calculadoras,y sumadores en lugar de corazón, haciendo cifras en París). Para ser tal requiere una noción distributiva y esa es la gran novedad.

Por eso dijo Peña:

“…La Reforma Hacendaria es una reforma social, con ella se propone reformar los Artículos 4 y 123 de la Constitución, para incluir el derecho a una Pensión Universal y a un Seguro de Desempleo para los trabajadores formales.

“Esta iniciativa tiene como propósito transitar de la seguridad social, como un derecho laboral, a la seguridad social, como un derecho humano.
Eso significa, pasar de la seguridad social condicionada a un empleo formal, a la seguridad social con cobertura para todos, dejando atrás el enfoque asistencialista de los programas de apoyo a la tercera edad.

“La Pensión Universal beneficiará a todos los mexicanos de 65 años o más, con un ingreso básico para su sustento. Esta medida refleja el principio de solidaridad que debe prevalecer en una sociedad que respeta y valora a sus mayores.

“Por su parte, el Seguro de Desempleo protegerá a los trabajadores y su familia, con un ingreso temporal cuando enfrenten la difícil situación de perder el trabajo…”

Pero como todos sabemos no hay nada perfecto y en el texto de la iniciativa se colaron barrabasadas como el impuesto a las hipotecas (como si éstas no fueran ya una losa); al alquiler de la vivienda (alquilan quienes no pueden comprar; es decir, los de menos ingresos; las viudas viven de sus rentas) o el pago de las colegiaturas.

Se podría decir, manden a los niños a la escuela pública, como si la pésima calidad de esta no quedara demostrada con el rechazo magisterial hasta a ser evaluados. Y cómo mandarlos si los maestros están meando en el Zócalo.

Muchos han dicho, esos puntos son distractores para darle escape a las compuertas del debate: se cede en lo aparente y se afirma lo necesario. Son fuegos de artificio. Quizá por eso el presidente del Consejo Rector del Pacto por México (lo cual ya es decir), César Camacho Quiroz, propuso discutir en el seno de este acuerdo el tema del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a las colegiaturas, lo cual equivale a un epitafio anticipado. Te llamabas.

–«Creo que podemos construir un buen acuerdo (apara quitarlo), que sin merma de las finanzas públicas (una vez quitado) pueda también evitar una carga de ese tamaño a los padres de familia».

“Agregó (dice 1-TV) que hay voluntad y disposición, y en los primeros intercambios de impresiones con el secretario de Hacienda, hay también disposición para tocar el tema y tener un buen término”.

Pero o más importante sea la opinión en este sentido del diputado Manlio Fabio Beltrones quien como tofos sabemos es el artífice de la intensa productividad de la Cámara en San Lázaro.

“(Notimex).- El líder de los diputados del PRI, Manlio Fabio Beltrones, reconoció que el planteamiento de gravar con IVA las colegiaturas, incluido en el proyecto de reforma hacendaria, no genera simpatía entre la bancada de su partido, ni en la Cámara de Diputados en su conjunto.

“Seguramente, sostuvo, se tomará la decisión que más convenga al interés general. “La preocupación del grupo parlamentario está muy dividida en su criterio sobre este tema”.

Pues si estaba dividida, dejó de estarlo. Con esa declaración los puso en orden. Ahora faltan todas las demás barrabasadas.

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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