El reciente premio de periodismo cultural –o especializado en asuntos relacionados con lacultura–, otorgado a Héctor Aguilar Camín en la Feria del Libro de Guadalajara, el cual fue instituido con el nombre de Fernando Benítez, obliga a recordar algunas tardes y conversaciones.
1.- Hermaaano, ¿qué país es este, hermano, ¿a dónde vamos a ir a dar?
-¿Qué sucede, Fernando? ¿qué te pasa?
-Encontré a una joven dispuesta, hermaaaano, una ex alumna, la invité a la intimidad; y fuimos a un hotelito discreto, Hermaaano, y no había lugar, que esperáramos en el estacionamiento como si fuéramos choferes de tráiler; fuimos a otro sitio y fue lo mismo, Hermaaano, la gente se la pasa en la fornicación, Hermaaano, nadie trabaja.
-¿Y luego?
-Ya no pasó nada, la complicación condujo al desistimiento, se hartó y me trajo al periódico… qué desgracia…
2.- Llegamos a la Facultad de Ciencia Políticas de la UNAM. Manuel Becerra Acosta quien comenzaba a dirigir “unomásuno”; Fernando, el patriarca y redactor. Los jóvenes masticaban aun la historia reciente del desastre en “Excélsior” la leyenda rodeaba a los dos personajes. El reportero era u n simple acompañante.
Fernando tomó la palabra y hechizó a los estudiantes. Becerra Acosta habló de los nuevos modos y formas de la prensa después de 1976. Se anticipaba al futuro.
-¿Te das cuenta, me dijo Fernando al terminar la conferencia, no podemos sembrar tantas esperanzas y luego fallarles a los jóvenes-? Sería una traición imperdonable.
3.- Llevaba semanas Benítez publicando u n artículo condenadísimo en “La Jornada”. A veces sólo un largo párrafo, pleno, maduro, conciso y definitivo., Prosa implacable e impecable.
Lo llamo y le pido lo mismo para la revista “Epoca”. Yo dirigía, él se rehusaba.
-No tengo tiempo.
-Fernando, te pago más que Carmen.
-¿Cuánto?
-Te ofrezco un estipendio móvil, mira, te doy un Centenario por cada texto. Dos al mes. No te doy billetes, te pago con oro amonedado, como en los viejos tiempos. Es el doble de lo que te da La Jornada. Nos ayudamos, hermano.
-Vienen, pero se lo das a Iván Restrepo, que él me lo guarde, ¿sabes? Es como mi caja chica, para mis dulces, para mis cosas personales. Hoy cada artículo se pagaría en más de 30 mil pesos. En esos años eran como 3 mil.
CAMPECHE
Obligado por las circunstancias el gobierno de Campeche ha cambiado la riqueza del oro negro por la posibilidad de la “industria sin chimeneas”. Por quinta ocasión el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid ha estado en Campeche para conocer y estimular los programas de recuperación económica.
Esto ha anunciado el gobernador Alejandro Moreno Cárdenas:
“…Campeche es el estado más seguro de nuestro país, lo cual es un factor fundamental para poder atraer las inversiones, para que los turistas nacionales y extranjeros nos visiten.
“En la industria turística, los campechanos hemos encontrado una fortaleza a partir de la caída de los precios y de la producción de petróleo.
“Tenemos a Calakmul como el único sitio cultural y natural, tenemos la ciudad fortificada de San Francisco de Campeche, tenemos gastronomía, tenemos mar, tenemos gente comprometida, pero contamos con algo muy importante que es la voluntad inquebrantable de nuestros pueblo para buscar oportunidades, alternativas, para hacer menos pesado el problema que provocó la caída de los precios del petróleo.
“En cada uno de sus estados ese es el compromiso; lograr que sus estados tengan más y mejores oportunidades, pero los invito a todos y sé que lo hacen. Tenemos que hablar bien de nuestro país, tenemos que hablar bien de nuestros estados, tenemos que presumirlos, tenemos que presumir nuestra riqueza turística, nuestra riqueza natural, nuestra riqueza cultural, tenemos que presumir a nuestra gente; porque como dicen por ahí Secretario, para vender al camello hay que hablar bien de él”.
DISLATE
Acusar al ex gobernador de Zacatecas, Miguel Alonso y de paso a su ex secretario de Finanzas, el actual gobernador Tello de desvíos cuando ésta ya ni siquiera estaba en la tesorería, es un dislate con el cual poco podrán avanzar los “Morenos” cuya revancha llega tarde y mal.