Escribamos un poco de cine y TV.
–¿Usted vio “El esqueleto de la señora Morales”?
Pues más allá de la anécdota en esa maravillosa cinta de Rogelio González, donde hay un crimen sin castigo y una enredosa andanza de inocentes y culpables, apariencias y confesiones tardías y todo lo demás, bien podría prefigurarse el futuro político de la Procuradora, doña Marisela del mismo apellido.
No la van a cesar ni la van a remover del cargo. Peor. Se van a reír de ella.
Y a menos de una sorprendente como improbable machincuepa en el Poder Judicial, las cosas se van a quedar como están. Hank en su casa, el gobernador Pepe Lupe Osuna Millán instalado en el ridículo como su procurador, un caballero quien no contento con llamarse Rommel se comporta como el Zorro del Desierto. Desierto de ideas, pero páramo al fin.
Pero parecen regresar “Los tres chiflados”. Recordemos.
Se llamaban Moe, Larry y Curly y eran, fundamentalmente, para decirlo en pocas palabras un trío de idiotas. Chistosos, pero muy estúpidos.
No había quehacer al cual llegaran exitosamente ni conocieron jamás buen puerto. Todo lo tiraban, todo lo ensuciaban; vivían de tropiezo en tropiezo y el mundo los miraba entre la carcajada y la incredulidad.
¿Cómo podían equivocarse tanto? Pues así, siendo fieles a su naturaleza.
Hoy, cuando la Procuraduría General de la República les ofrece a los mexicanos una más de sus pifias no podemos sino sentir vergüenza. Trabajar así es la verdadera forma de mandar al diablo a las instituciones. Pero lo más lastimoso es la forma como empujaron al Ejército a un pleito ajeno.
Pero las Fuerzas Armadas son tan fuertes como para resistir eso y más. Si algún pecado cometieron los soldados de México ha sido la obediencia. Nada más.
Hoy la frase de hace días se vuelve realidad: todo político preso es un preso político. Y si no lo es, lo mandamos a hacer. Bonita paráfrasis de la riqueza de su mítico padre.
Los tropiezos de la Procuraduría General de la República no pueden darle alegría a nadie. Nos deben preocupar a todos. Nos deben preocupar mucho a todos.
Aquí no se trata de juzgar la aventura de Agua Caliente. Mucho menos defender a Jorge Hank quien ya lo vimos tiene quien lo defienda y de muy buena manera.
Lo grave ahora es darnos cuenta de la escasa capacidad de los colaboradores del Presidente de la República.
A un gobierno profesional, con las altas responsabilidades constitucionales encomendadas, se le deben exigir habilidades suficientes en el grupo de quienes encabezan las instituciones nacionales. Todo lo demás es un desatino.
–¿Esos son para el Partido Acción Nacional los mejores perfiles en el inventario posible del talento? Pues vaya ridículo.
Cuando el presidente Felipe Calderón designó a Marisela Morales al frente de la PGR encomió su trayectoria y dijo de ella: se ha formado en la Procuraduría General de la República y “su papel será crucial para consolidar a México en un país de leyes.”
Pues con su perdón señor presidente, pero los hechos recientes nos ofrecen un pobre desempeño en tan crucial papel como el encomendado a la señora Marisela, dicho sea esto también con todo el comedimiento debido a la señora Hillary Clinton quien no sabe mucho de la vida mexicana.
Quizá sepa de los informes recibidos de sus agencias de espionaje, pero de la neta del planeta, le pasa como con la becaria. Fue la última en saberlo.
Tres procuradores ha nombrado Felipe Calderón y del trío no se ha hecho uno. ¿Habrá tiempo todavía para cambiar a la señora Morales o tendrá cuerda suficiente para seguir en esta judicialización de las oposiciones electorales.
Del “michoacanazo” al “tijuanazo”. Cuanta pena ajena.
STANFORD
Después de la filípica contra el pasado priísta en Stanford, el presidente firmó ayer un documento de exigencia para sacar adelante varios temas nacionales en un periodo extraordinario:
“…es mi deber constitucional no sólo exhortarla (a la Cámara de los Diputados) sino convocarla a sesiones para resolver este pendiente (los nombramientos de consejeros en el IFE y otros seis asuntos) que es de suma trascendencia para la vida democrática de México…es imprescindible que todos los actores políticos tengamos la capacidad de poder resolver estas coincidencias, por encima de las diferencias por legítimas que sean».
Pero como el PRI es mayoría, la respuesta ya se la mandaron en la voz del diputado oaxaqueño Ramírez Puga:
“No somos sus empleados”.
CONGRESO
Al menos 400 especialistas se reunirán durante cuatro días (del 25 al 28 de este mes) en el III Congreso Internacional de Dirección de Proyectos –PMTour México 2011—con la intención de aprender, intercambiar experiencias, conocer soluciones y relacionarse con sus colegas latinoamericanos.
La reunión se realizará en el Hotel María Isabel. A quien le interese el tema puede consultar estas direcciones electrónicas: www.pmtourmexico.com o www.sequalsolutions.com.mx.