Entre las muchas secuelas del colonialismo, los mexicanos les guardamos una reverencia casi totémica a los medios extranjeros de comunicación. Basta una línea en el NYT para sentirnos en el cielo o en el infierno, según la orientación de la nota con cuyo prestigio internacional el diario se ha dignado mirarnos.
No parecen entender algunos cuál es la diferencia entre James Reston y Jason Blair, por ejemplo. Es más, ni siquiera saben quiénes son esos señores ni cuál fue su trayectoria en el rotativo de Manhattan y no será esta columna quien los rescate de su ignorancia.
Hace algunos años un amigo mío obtuvo la portada de la revista “Time” en favor de un candidato mexicano. Con eso vivió muchos años de gloria profesional.
En los días recientes la prensa extranjera se ha ocupado mucho de nosotros. Y no por foránea ha dejado de incurrir en errores de primer año. El más notable el del diario “The Guardian” de la Inglaterra, cuyas explosivas revelaciones en cuanto a los vínculos entre Televisa y Enrique Peña ya habían sido publicados en México hace cosa de siete años.
Lo increíble de “The Guardian” es el monumento a la imprecisión. Cuando un periódico nos advierte de las dudas internas sobre la autenticidad de su contenido, las cosas no se ajusta a la ortodoxia profesional, por decir lo menos.
Dice el diario británico:
“…Si bien no ha sido posible confirmar la autenticidad de los documentos, extensas verificaciones han demostrado que los nombres, fechas y situaciones que se mencionan coinciden en gran medida con el desarrollo de los acontecimientos”.
Excepto si se trata de un error de traducción nadie en su sano juicio publicaría un párrafo como ese del guardián. Lo he tomado de la edición del 8 de junio de “La jornada”.
¿Cómo se dice, “ NO HA SIDO POSIBLE CONFIRMAR LA AUTENTICIDAD” , para de inmediato explicar: “EXTENSAS VERIFICACIONES, ETC, …” ¿No sería la extensa verificación suficiente para confirmar la autenticidad?
O en sentido contrario, si a pesar de las extensas verificaciones no se ha logrado probar la autenticidad, pues la dicha certeza es una invocación, un supuesto, no un hecho.
En este sentido parece haber una fórmula para salvarle la cara a su corresponsal. Él ha convencido a su central de la veracidad de los documentos citados y logrados tras una notable labor reporteril (con siete años de retraso) y su redacción le cree. Aquí el periodismo de la “Pérfida Albión” se nos revela como un acto de fe.
Pero en otras cosas también la prensa extranjera se ha ocupado de esta terrible porción del Tercer Mundo. El segundo debate ha sido ocasión para dotar a los contendientes de herramientas para su propaganda. Por ejemplo, el dictamen de “El país” en favor de Josefina Vásquez:
“Josefina Vázquez Mota ganó el segundo debate de la elección presidencial en México. La candidata del PAN, partido en el Gobierno, fue creativa en su exposición, clara en su argumento de que hay que elegir entre ella o el retorno del viejo modelo priísta, representado según la panista por dos candidatos en esta elección. Ganó pero la duda es si su buena actuación le bastará para salir del tercer lugar en las encuestas, sitio al que ha caído después de una errática campaña. Si lograra desafiar la ventaja de Enrique Peña Nieto en las tres semanas que quedan antes de la elección. Por su parte, el candidato del PRI puede darse por satisfecho porque sobrevivió al encuentro sin apenas fatigarse”.
Pero las cosas no se ven igual desde Times Square. Para el NYT el ganador fue otro:
“ (Vanguardia) El diario The New York Times publica hoy una nota en su versión electrónica en donde reseña el segundo debate entre candidatos a la Presidencia de México y destaca especialmente el desempeño de Gabriel Quadri, candidato del Partido Nueva Alianza.
«El encuentro podría ser recordado por la forma en la que Quadri tomó control del debate en ocasiones, pese a que pocos analistas le dan alguna oportunidad de ganar los comicios», publica el NYT.
“La nota afirma que Quadri de la Torre utilizó el tiempo para retar «y sermonear» a otros candidatos, así como para extraer acuerdos de ellos, por ejemplo, que no se criminalice a las mujeres que practican el aborto a nivel nacional”.
CHIAPAS
Tras los hechos violentos en Villaflores, Chipas donde fue asesinado Edgardo Hernández Corzo, el PRI local reaccionó rápidamente: canceló la candidatura de Ulises Grajales.
Roberto Albores Gleason, presidente del PRI en el estado, frente a los señalamientos contra el candidato del PRI a la Presidencia Municipal de ese lugar, Ulises Grajales Niño, determinó cancelar la candidatura de Grajales Niño y conminarlo a trabajar con las autoridades en el esclarecimiento los hechos y deslindar responsabilidades.
«Nuestro papel como instituto político sin duda es no incriminar a nadie, pero no estaremos omisos a los actos de violencia; en este sentido pedimos a las autoridades que de forma expedita aclaren la situación jurídica de Ulises Grajales» sostuvo Roberto Albores.
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En el PRI reprobamos este tipo de actos de donde vengan; nuestra tarea es caminar, en armonía, democracia y paz, por el impulso y desarrollo de Chiapas, enfatiza el dirigente estatal.El presidente del PRI en Chiapas, Roberto Albores Gleason, condenó la violencia suscitada en el municipio de Villaflores que cobró la vida de Edgardo Hernández Corzo, al tiempo que demandó se investigue a fondo el caso. «Los priístas repudiamos los hechos violentos suscitados en Villaflores y exigimos la aplicación irrestricta de la ley a quien resulte responsable», sostuvo el dirigente.
Ante un rotundo rechazo a la violencia en la contienda electoral, Albores Gleason manifestó su más sentido pésame a la familia del hoy occiso y exigió a las autoridades de justicia dé respuesta pronta y se identifique y castigue a los responsables de este artero crimen.
Albores Gleason informó que dado que la autoridades judiciales están vinculando en los hechos al candidato del PRI a la Presidencia Municipal, Ulises Grajales Niño, el Comité Ejecutivo Nacional, a propuesta del Comité Directivo Estatal, ha tomado la determinación de cancelar la candidatura de Grajales Niño y lo conmina para que coadyuve con las autoridades en las indagatorias que permitan esclarecer los hechos y deslindar responsabilidades.
«Nuestro papel como instituto político sin duda es no incriminar a nadie, pero no estaremos omisos a los actos de violencia; en este sentido pedimos a las autoridades que de forma expedita aclaren la situación jurídica de Ulises Grajales» sostuvo Roberto Albores