La violación a las leyes o reglamentos en la Ciudad de México es el resultado de la agresión al futbolista del Club América, Salvador Cabañas, en el interior de un Bar en el sur del DF, ante ello la fracción parlamentaria del PAN en la ALDF responsabilizó a las autoridades de la Delegación Álvaro Obregón, pues según el ordenamiento legal este sitio debió haber cerrado a las 3 de la mañana y el incidente se registró poco antes de las 6 horas.
En voz del diputado José Manuel Rendón Oberhauser, sostuvo que esto es consecuencia de las irregularidades o inconsistencias con las que operan muchos establecimientos en la demarcación. Ante ello, insistió el legislador, es inválido el argumento del Jefe Delegacional Eduardo Santillán, para justificar que desconocía que el bar cerrara a las 6 de la mañana, cuando la reglamentación es muy clara.
Además la falta de verificación de la operación del establecimiento indica que el antro contravenía la normatividad e incumplía con medidas de seguridad para los clientes, ya que el atacante portaba un arma de fuego.
El diputado panista subrayó que si bien existe una propuesta en la ALDF para ampliar los horarios, bajo el argumento de un mayor fomento económico para la ciudad, se considerará este tipo de eventos que resultan fatales, por lo que se hace necesario analizar a fondo la viabilidad..
Rendón Oberhauser se pronunció por trabajar en una reforma integral que obligue a los dueños de los establecimientos mercantiles, en especial de antros, bares, cantinas y restaurantes, a ser corresponsables con lo que suceda al interior de esos negocios. Se hará en la Asamblea Legislativa una reforma que obligará a los propietarios a tomar medidas de seguridad obligatorias como inspecciones permanentes, instalación de videocámaras de vigilancia, límite de horarios, que tienen que ser supervisados por las autoridades delegacionales.
Asimismo se analizan propuestas encaminadas a optimizar el espacio vital de los jóvenes en el DF como generador de más espacios como áreas deportivas, culturales y de esparcimiento, lejos de prácticas dañinas para elevar su calidad de vida