López Astudillo, quien fue testigo colaborador y se había convertido en uno de los principales sospechosos del caso, fue trasladado al penal de máxima seguridad del Altiplano

A tan solo 20 días de que se cumpla una década de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, las autoridades detuvieron otra vez a Gildardo López Astudillo, alias «El Gil», presuntamente involucrado en la desaparición de los estudiantes en septiembre del 2014. La detención fue cumplimentada por elementos de la Marina Armada de México y la Fiscalía General de la República (FGR), quienes informaron que el detenido ha sido trasladado al penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, donde quedó a disposición de un juez.

López Astudillo, quien se había desempeñado como testigo colaborador de la FGR bajo el nombre clave «Juan», había sido arrestado por primera vez en 2015. Sin embargo, en 2019, un juez federal lo liberó tras desestimar las pruebas presentadas en su contra, argumentando que estas se habían obtenido de manera ilícita. Desde su liberación, el exlíder del grupo criminal Guerreros Unidos había intentado evitar su reaprehensión a través de un amparo, el cual fue presentado en marzo de 2024.

Según fuentes oficiales, «El Gil» fue uno de los principales responsables de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa el 26 de septiembre de 2014. Su participación en el caso fue señalada por la investigación que lo identificó como quien presuntamente ordenó la desaparición de los normalistas, tras alertar al entonces líder de Guerreros Unidos, Sidronio Casarrubias, sobre la presencia de los estudiantes en Iguala esa noche.

Aunque López Astudillo fue liberado en 2019, la reapertura del caso y nuevas investigaciones lo han vuelto a colocar en la mira de las autoridades. En 2020, había comenzado a colaborar como testigo, pero su testimonio no ofreció avances significativos en la búsqueda de los estudiantes desaparecidos.

El arresto de «El Gil» se produce en un contexto en el que las familias de los 43 normalistas continúan exigiendo justicia y resultados en la investigación. Vidulfo Rosales, abogado de los padres de los estudiantes, expresó su frustración ante la falta de avances significativos en la extradición de Tomás Zerón, exfuncionario clave en el caso. Según Rosales, las reuniones con el presidente Andrés Manuel López Obrador han sido tensas y no han arrojado resultados concreto