El alcalde de la localidad, Yorgi Arciniega, inicialmente dijo que había 30 fallecidos y 100 desaparecidos, lo que ha negado el gobierno represor de Nicolás Maduro

Un saldo de 16 muertos y 11 heridos dejó el derrumbe en una mina ilegal de oro en el estado Bolívar, en el sur de Venezuela, conocida como Bullaca Loca, según el reporte ofrecido por el viceministro para la Gestión de Riesgo y Protección Civil, Carlos Pérez Ampueda.

El funcionario señaló que inicialmente el mandatario represor, Nicolás Maduro, informó de 15 muertos y 11 heridos, con los desestimó una información dada más temprano por el alcalde de Angostura, Yorgi Arciniega, quien dijo que había 30 fallecidos y unos 100 desaparecidos.

A través de su cuenta de la red social X, Pérez Ampueda indicó que, hasta ese momento, el equipo de Protección Civil había rescatado 11 personas heridas y localizado 16 cadáveres, que fueron trasladados -junto con los heridos- hasta un puesto de atención habilitado por las autoridades en la población de la Paragua.

En ese lugar, explicó, «están instaladas tiendas de campaña para atención prehospitalaria», así como «salas de autopsia (atendidas) por expertos en medicina forense».

Nicolás Maduro dijo que se trata de una mina ilegal a la que se mandó «todo el equipo de Protección Civil», y aseguró que, aunque la zona «es muy adentro» y con problemas de conexión, los equipos de rescate ya «están en el sitio».

En ninguno de los reportes gubernamentales se menciona algún número de desaparecidos. En vista de la tragedia, la principal coalición opositora, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), expresó su «profundo dolor» e hizo «votos por la pronta recuperación de los heridos».

«Este lamentable accidente es consecuencia de las condiciones en que se realiza en muchos casos la actividad minera. La manera cómo el régimen dictatorial de Nicolás Maduro permite la actividad de minería en esa zona solo trae tragedias humanas y ambientales a nuestro país», expresó el bloque antichavista en X.

En redes sociales circulan videos que dan cuenta de la gran depresión producida en el sitio, en el que decenas de personas intentan ayudar a quienes quedaron tapiados.