Muchas son las cosas agrupadas en conjunto.

Los Tres Reyes Magos o las Mil y una Noches. Diez fueron las plagas de Egipto y siete los pecados capitales. Diez los días para conmover al mundo con la Revolución Bolchevique; siete los mares del mundo y cien por diez las curvas carreteras de Mil Cumbres.

Cuatro son los jinetes del Apocalipsis y también una cuarteta los libros de Lawrence Durrell con los ensueños de Alejandría. Dos pares de aurigas en la cuadriga; uno en la biga. Los esqueletos, dice Ramón, crujen en parejas.

En Cuatro Ciénegas nació Venustiano Carranza y siete son los colores del arco iris. Veinte los famosos poemas de amor de Pablo Neruda y una sola su canción desesperada. Siete los sabios atenienses y otros tantos los de de México.

Pero en los conjuntos para la vida política reciente, el Partido Revolucionario Institucional nos ha obsequiado una nueva media docena: “Las seis mentiras de López Obrador”. Al menos así las ha llamado Pedro Joaquín, el presidente del PRI.

Ahora veremos cuáles son, así alguien diga, “…se me hacen pocas”.

“Primera Mentira: Supuesto Rebase del Tope de Gastos de Campaña. Desde el inicio de la campaña, la Coalición Compromiso por México solicitó la auditoría anticipada de sus gastos. Fuimos los únicos que así lo hicimos. Las autoridades competentes cuentan y seguirán contando con toda la información que confirma que no se rebasaron los topes de campaña.

“Segunda Mentira: Supuesta Inequidad en Medios Electrónicos. Todos los candidatos tuvieron abundante acceso a los medios de comunicación, y lo siguen teniendo ahora.

“La Reforma Electoral de 2007-2008 reguló estrictamente el acceso equitativo a los medios electrónicos. Además, el monitoreo realizado por la UNAM demuestra que hubo equidad en la cobertura.

“En todo caso, al candidato presidencial perdedor, le molesta la diversidad de los medios; quisiera que todos estuvieran exclusivamente a su servicio. Ya vimos que si lo apoyan, son medios “progresistas”, pero si lo critican, son “colonizantes”. Es insultante para los mexicanos argumentar que los medios tienen el poder para imponerle un candidato a los votantes.

“Tercera Mentira: Supuesta Manipulación de Encuestas.

“El Movimiento Progresista denunció el supuesto uso de las encuestas para manipular a la opinión pública. Sin embargo, todas ellas previeron el orden final de los candidatos, así como el crecimiento que el Movimiento Progresista tuvo a lo largo de la campaña para quedar en segundo lugar. Las empresas encuestadoras han ofrecido explicaciones técnicas sobre la diferencia de sus diagnósticos con respecto a los resultados finales. Es impensable que todas ellas se hubieran prestado a la manipulación.

“Cuarta Mentira: Supuesta Compra y Coacción de Voto. López Obrador se ha obstinado en reclamar la compra de 5 millones de votos, una cifra acomodada al tamaño de sus necesidades.

“Esta acusación es falsa y cae por sí sola. Equivale al absurdo de que uno de cada diez votos hubiera sido comprado. Habría millones de testigos, cuando lo único que hay, son 50 millones de electores que ejercieron sus derechos políticos con dignidad.

“Contrario a lo que López Obrador afirma, en las últimas dos décadas se ha fortalecido el marco institucional para limitar las prácticas antidemocráticas y así preservar la autenticidad y libertad del voto.

“Acusaciones como las que implican al Grupo Soriana son falsas. Sus propios directivos han aclarado que las tarjetas presentadas forman en realidad, parte de un programa de puntos y descuentos, vigente desde 2010, para los trabajadores a los que no se les puede depositar dinero.

“No sólo eso, el propio directivo recordó que durante la administración de López Obrador, Soriana emitió tarjetas donde los adultos de la tercera edad recibían depósitos de las pensiones que otorgaba el Gobierno del Distrito Federal.

Quinta Mentira: Supuesta Intervención de Gobernadores. La denuncia afirma también, que los gobernadores priistas fueron claves en la compra de voto. Esto es falso. Si así fuera, ¿cómo explicar que el PRI no ganó en Nuevo León, Quintana Roo, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz, estados gobernados por militantes de nuestro partido? ¿Cómo explicar también, que Enrique Peña Nieto ganara en la mitad de los estados gobernados por miembros de otros partidos políticos?

“Argumentar que el Estado de México supuestamente tenía una cuota de 2 millones 900 mil votos, es tan falso e insultante para los mexiquenses, como sería para los capitalinos decir que el Jefe de Gobierno del DF cumplió con una cuota de 2millones 569 mil sufragios para el candidato de la izquierda.

“Sexta Mentira: Supuestas Estructuras Paralelas de Financiamiento. En el caso particular de Monex, los propios directivos de la empresa han negado categóricamente la existencia de esquemas de financiamiento paralelos que lo relacionen con los partidos políticos, asimismo le ha presentado a las autoridades competentes la documentación que lo demuestra”.

Tras esta enumeración, lo cual no es sino un recurso defensivo, notable y estructurado en todo caso, el PRI nos regala un componente adicional. En él se sostiene –a futuro–, toda su argumentación. Y debo decir, es la parte más débil de todo el largo parlamento de Pedro Joaquín Coldwell:

“…hacemos un llamado a todos los actores políticos a que nos sometamos al imperio de la Ley y a las resoluciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación”.

Pues lamento decirlo, de veras lo lamento, pero el Movimiento Progresista no se va a allanar a la resolución del Tribunal. Ahí va a empezar, como dicen los rusos, el verdadero desmadre, tovarich.

LEGORRETA

Un adiós muy sentido para el arquitecto Jorge Legorreta con quien hubo tantos momentos compartidos en torno de la historia y la vida del DF en los últimos veinte años. Descanse en paz.

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

Deja una respuesta