Robert Hooke fue uno de esas inteligencia multidireccionales. Lo mismo se metía en la biología, en la física o en la astronomía; las matemáticas o la arquitectura. Nació en el siglo XVII (l635) y entre las muchas cosas debidas a su talento creó ley sumamente útil en la consideración de la resistencia de los materiales pero de invaluable conveniencia si se aplica a la política.
Es una ley sobre los límites elásticos.
Dicho de otra manera, hasta dónde se puede modificar un material antes de quebrarlo: “Ut tensio sic vis” («como la extensión, así la fuerza», en latín). Alguien diría, hasta dónde se puede estirar la liga sin romperla.
Obviamente hay materiales con un grado de deformación y recuperación mayor a otros. Lo rígido, lo duro en extremo, se rompe como el diamante cuando se le golpea con otro. El viejo ejemplo del árbol en la tormenta es bien conocido: el duro tronco se raja o el aire lo desarraiga. El bambú y la palmera se doblan con la racha.
La espiga permanece y regresa a su posición inicial. La vara terca se parte, se troncha, se acaba.
Pero así como en la física (ciencia exacta) esta relación entre fuerza y resistencia es precisa y exacta, calculada a través de abstrusas ecuaciones, en la política es cosa de sentido común y conocimiento del propio valor.
Al menos eso parece haber entendido la diputada Alejandra Barrales quien ayer ofreció una conferencia de prensa para anunciar su aceptación de cuanto el Partido de la Revolución Democrática resuelva en relación con el candidato al gobierno de la ciudad, proceso ante el cual se inconformó en su primera fase.
Los medios dieron a conocer por la tarde esta noticia:
“Alejandra Barrales aseguró que aceptará cabalmente el resolutivo que tome el Consejo Electivo del PRD, el próximo 11 y 12 de febrero, respecto a la candidatura de la izquierda para el Gobierno del Distrito Federal.
En conferencia de prensa, luego de reunirse con el jefe del gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, la perredista dijo que será un factor de apoyo y de unidad en el proceso electoral de este año.
“Acompañada de un grupo de diputados del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, Barrales declinó a hacer algún comentario sobre el ofrecimiento de candidatearse para un escaño en el Senado, tras señalar que se mantendrá como activista y militante del Sol Azteca”.
Pero de manera casi simultánea al anuncio de la admisión de las decisiones partidarias (la encuesta nunca fue vinculatoria sino indicativa) aparecieron algunos datos reveladores de cómo se le presentarán las cosas a Miguel Ángel Mancera candidato de “las izquierdas”: ganará todo, lo pongan como lo pongan.
La empresa “Parametría”, considerada entre las casas encuestadoras más serias, divulgó ayer esta información:
“De entrada, se observa que el PRD está a la cabeza de las preferencias electorales, aunque de ello no debe inferirse que así permanecerá. La continuidad del Sol Azteca en el gobierno del DF dependerá cuando menos de dos variables:
“1) perfiles de los contendientes –conocimiento, opinión, evaluación de trabajo, trayectoria- y
“2) arrastre (coattail effect) de los candidatos a la Presidencia de la República.
“Para los electores -especialmente los capitalinos, quienes exhiben un comportamiento electoral altamente sofisticado-, es cada vez más importante el candidato, en detrimento del partido que lo postula. Los votantes mexicanos privilegian a personajes conocidos por su trabajo local, más que por su trayectoria política o social en otros niveles.
“Los datos del ejercicio muestran ventaja para el PRD, instituto que por sí solo obtiene 38% de la preferencia bruta (con un punto porcentual más si se consideran las aportaciones de sus aliados PT y Movimiento Ciudadano), y 44% en la preferencia efectiva (46% sumados)…
“…Al poner nombre a las opciones políticas el PRD, con Mancera como abanderado, permanece a la cabeza de las preferencias, con 39%, siendo el caso en el que candidato que le significa más al partido.
“Tanto Beatriz Paredes por el PRI-PVEM como Isabel Miranda por el PAN significan pérdidas en puntos porcentuales para los partidos que abanderan, si se toma en cuenta la preferencia bruta. Dato no menor en un momento que el electorado nacional está votando cada vez más por candidatos.
“Tanto los precandidatos del PRD y PAN como la potencial candidata del PRI, Beatriz Paredes, son personalidades muy conocidas para estar empezando una contienda electoral -Paredes 92%, Mancera 82%, y Miranda de Wallace 72%-, datos inusuales para el inicio de una campaña.
“Paredes, no capitaliza sus altos niveles de conocimiento en preferencia, como sí lo hace el aspirante de PRD, PT y Movimiento Ciudadano, Miguel Ángel Mancera, quien aún con menor nivel de conocimiento logra mejor popularidad. El ex Procurador suma 63% de opinión efectiva, con lo que supera los niveles tanto de Paredes como de Isabel Miranda de Wallace, aspirante a la candidatura del PAN”.
Dicho de otra manera: las dos mujeres ni juntas, logran superar a Mancera. Quince puntos para Isabel; 21 para Beatriz y 39 para Miguel Ángel. Al menos hasta el día de ayer.
Por eso Alejandra Barrales comprendió los beneficios de la elasticidad.