El mandatario de EU frenó restricciones comerciales que el Departamento del Tesoro preparaba ante las ineficaces acciones del gobierno de López Obrador; da un año de plazo para ver resultados o se aplicarán medidas

La protección y conservación de las especies en peligro de extinción es algo que preocupa al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, por lo que ante la tibieza mostrada por su homólogo mexicano, el populista Andrés Manuel López Obrador, le exhortó a hacer más y no andar con medias tintas e intensifique acciones para la conservación de la vaquita marina y la totoaba, dos especies en peligro de extinción que tienen su hábitat en aguas mexicanas del Golfo de California, por lo que amagó con aplicar sanciones comerciales a la administración de la 4T si en el plazo de un año no se ven resultados positivos y acciones reales para la protección de estas especies.

La invitación de Biden a López Obrador para que se ponga a trabajar en la protección de la Vaquita marina y la totoaba se hizo pública, luego de que el pasado 17 de julio el mandatario estadounidense envió una carta al Congreso de su país, en la que pide frenar «al Departamento del Tesoro la imposición de medidas comerciales a los productos mexicanos», ya que el gobierno mexicano está implementando medidas de protección, y advierte que varias agencias estadounidenses «supervisarán las acciones de México y el progreso y me proporcionarán un informe a más tardar dentro de un año», por lo que una vez cubierto ese plazo se analizará si se aplican sanciones comerciales o no.

Medios estadounidenses destacan que en su misiva, Biden asevera que el reporte sobre la protección de la Vaquita marina y la totoaba será usado «para evaluar si serán necesarias medidas adicionales, incluidas posibles restricciones comerciales» a productos mexicanos con mayor entrada a EU. En 2021, el valor de todos los productos del mar enviados de México a EU se acercó a los 600 millones de dólares. 

En febrero pasado, según la cadena Telemundo, las autoridades estadounidenses habían advertido que México estaba vulnerando el capítulo medioambiental del acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC).