El hecho parece simple: Arturo Zamora renunció al PRI. Pero el fondo es carambola de tres banda y, por ello, el exalcalde de Zapopan no se olvidó de solicitar al tricolor que dé aviso de que abandona la militancia, lo que lo hace elegible en las próximos elecciones.
Hay una disputa nacional en urnas para 2024, la de la carrera presidencial, pero también hay frentes de guerra partidista que moldearán los resultados. Y en Jalisco, uno de los 32 frentes, el PRI se desmorona llevándose hacia el fondo a la Alianza Opositora.
Los ganones de esto son:
1.- Morena, que parece haber captado y coptado a Zamora (en las filas de la corcholata Adán Augusto López, que tan activo ha estado en la Perla Tapatía).
2.- Movimiento Ciudadano, que deseaba deshacerse del escenario de tres contrincantes (que favorece a Morena) y de paso aligerar el poder que el grupo Padilla, dominante en la poderosa Universidad de Guadalajara, ya que es declarado aliancista).
Zamora renunció a dicho partido (y de facto a la Alianza Opositora en el estado) a través de un video que hizo público a la par de su carta de desafiliación al tricolor.
Indicó que se había alejado de la escena pública y de la política en los útimos meses t así había sido, pero eso no impidió que siguiera apareciendo como una posible opción electoral de cara al 2024. Zamora tiene un peso tan claro tanto a nivel estatal como en el área Metropolitana, que en la última encuesta de Massive Caller resultó el segundo opositor con mayores preferencias entre los electores (22 por ciento), sólo por detrás del panista Alfonso Petersen Farah.
La renuncia causó sorpresa, pero aún más el encadenamiento de hechos al que ha dado pie.
A la par que Morena ha ido cayendo lentamente en las encuestas en favor de Movimiento Ciudadano en la carrera por la gubernatura, Adán Augusto López, el secretario de Gobernación de México realizó una visita oficial a Jalisco en la que las se incluyeron reuniones con los morenistas locales. Oficialmente la visita estuvo limitada a impulsar las nuevas reglas electorales derivadas del llamado Plan B de reformas electorales. Sin embargo, quedó claro que el secretario de Gobernación federal estaba asentándose en el estado en tanto es una de las “corcholatas” del partido del presidente AMLO.
Finalmente yZamora estuvo en reuniones con Adán Augusto López y se manera extraoficial sus cercanos señalan que ese es el principal indicio de lo que viene.