Seguramente tardaremos mucho tiempo en saber o quizá no lo sepamos nunca, quienes son los responsables del tiradero de cadáveres en Zacatecas y Veracruz, con cuyo reparto sangriento, la delincuencia organizada ha comenzado a delinear el rostro de este año, cuya violencia se antoja superior a la registrada en  cualquiera de los periodos anteriores.

Pero de seguro tardará mucho tiempo. 

Tanto como el cumplimiento de las órdenes de aprehensión giradas (otra vez) en contra de Genaro García Luna, Luis Cárdenas Palomino y el licenciado “Chapo” Guzmán.

La justicia mexicana la ha emprendido, “rápida y furiosa” contra estas tres personas, una de las cuales jamás podrá ser aprehendida porque nadie lo va a sacar del Guantánamo de las Rocallosas en los Estados Unidos, donde está recluido.

Aunque parezca un absurdo involuntario, la justicia es ciega y en este caso no ve cómo las pesquisas de la fiscalía resultan absolutamente estériles, porque se trata de aprehender a los presos en otro país; ni siquiera se busca estimular el proceso de extradición; no, son simplemente trasnochadas órdenes de captura, dadas a conocer unos cuantos días después de la sopapina del presidente López Obrador a  Felipe Calderón a quien le exige explicaciones acerca del nombramiento, ya remoto, de quien. fuera su secretario de Seguridad.

Esto dijo el presidente hace unos días:

“…No es nada más decir ‘no sabía’ (…) Los conservadores añoran los tiempos pasados. En términos de justicia, el hombre fuerte, el más cercano a Calderón, el secretario de Seguridad Pública está acusado de proteger a un grupo de delincuencia organizada. Nos debe Calderón esa explicación, independiente de lo legal…”

Pero dependiente de lo legal se nos informa de estas órdenes de captura, lo cual nos muestra, una vez más, el recurso de llamar la atención sobre el pasado cuando no se puede explicar ni resolver el presente. 


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El juicio de García Luna, según la más reciente información, podría ocurrir hasta mediados del próximo año. Eso si no hay recursos dilatorios adicionales.Y estando así las cosas allá, resulta difícil cumplir con el pedimento judicial junto con otros cinco, por la operación “Rápido y furioso”, un caso resucitado por Marcelo Ebrard en su empeño por corresponsabilizar a los Estados Unidos de la violencia en este país.

La violencia no es culpa de las personas; es responsabilidad de las armas. No es un asunto de drogas; es una cuestión de “artillería moral”: los fusiles de asalto, las pistolas de alto calibre; las granadas, los lanzacohetes, las bazucas y los drones, se accionan y disparan solos. Tienen vida propia. 

Con esa lógica los responsables de la explotación femenina y la prostitución, no son los tratantes de blancas, son los fabricantes de colchones.

OAXACA

Mientras “Morena” se hunde en un mar de protestas, sospechas,descalificaciones y demás por su proceso interno con miras a las elecciones por el  gobierno de Oaxaca, Alejandro Murat, gobernador del estado sigue “a Dios rogando y con el mazo dando”.

Hace apenas unas horas informó lo siguiente:

“Con el propósito de mejorar la comunicación  terrestre entre la capital del estado y las regiones del Istmo de Tehuantepec y la Costa, el  gobernador Alejandro Murat Hinojosa supervisó la construcción de las autopistas Mitla Tehuantepec II, que a la fecha presenta un avance físico del 58.28%, así como el tramo Barranca  Larga- Ventanilla que actualmente registra un avance físico del 74. 64%. 

“Además, el Gobernador atestiguó la culminación de la pavimentación  de cinco kilómetros del camino a la localidad de Santiago Quiavicuzas, perteneciente al  municipio de San Carlos Yautepec, los cuales se concluyeron con recursos del Programa de  Pavimentación de Caminos a Cabeceras Municipales. 

“Como van construyendo su camino, este año podrían estar terminados los 24 kilómetros  restantes. El objetivo es concluir su camino y la autopista, por ello les quiero pedir que me  ayuden, que sigamos trabajando como hermanas y hermanos…” 

Rafael Cardona | El Cristalazo

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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