El periódico estadounidense alerta en una editorial que López Obrador quiere todo para el partido guinda al echar toda la maquinaria del Estado a favor de Sheinbaum, quien deberá cumplir sus instrucciones al pie de la letra

Sin señalar directamente al viejo PRI que gobernó durante más de 70 años y de donde salió Andrés Manuel López Obrador, con esa enseñanza mañosa con la quiere repetir el control de un Estado Unipartidista, ese es el objetivo que pretende el populista mandatario, quien no solo ha sido incapaz de cumplirse promesas de gobierno, sino que espera que con la candidata dela4T, Claudia Sheinbaum, amarre sus compromisos con aliados de gobiernos represores como los de Venezuela, Cuba y Nicaragua, y manejar a placer sus proyectos, de los que Claudia ya tiene las instrucciones marcadas, destaca a manera de advertencia, una editorial del periódico estadounidense “The Wall Street Journal”.

El rotativo alerta que en la elección del próximo 2 de junio alerta que en caso de una victoria de la 4T, que conforman Morena y sus partidos satélites, PT y PVEM (que sin el partido guinda ya hubieran perdido su registro), el país podría acercarse a una “visión de un Estado unipartidista”.

The Wall Street Journal destaca una serie de diferencias entre Sheinbaum y Gálvez, las candidatas más fuertes de acuerdo con las principales encuestas, y a Máynez no lo menciona, toda vez que es un aspirante que su labor es arrebatarle votos a Xóchitl, con lo que se cumple un presunto acuerdo de Dante Delgado, dirigente nacional de MC, con AMLO.

El diario destaca que “el espíritu emprendedor, la competencia empresarial, la defensa de los derechos de propiedad y la apertura de los mercados son los temas de la campaña de Xóchitl, que la diferencian de Claudia y AMLO”, que actúan improvisando y sin tener certeza de proyectos claros, indica el texto.

El rotativo especialista en finanzas subraya que un posible triunfo de la abanderada de oposición rompería con la política exterior de López Obrador, a quien señalan de utilizar el tema de migración como moneda de cambio con el mandatario de EU, Joe Biden “para evitar la acción de Estados Unidos en el marco del T-MEC, para obligar a México a dejar de marginar la participación de los inversionistas extranjeros en el sector de energía”.

El diario asegura que el gobierno de AMLO “es aliado de Venezuela y Cuba y hogar de un gran número de agentes de inteligencia rusos, según señaló en 2022 el Comando Norte de Estados Unidos”.

La editorial también resalta que el Gobierno de México afirma que sigue una política de no intervenir en otros países, pero la realidad es todo lo contrario, toda vez que tres de los embajadores mexicanos “han sido declarados personas non gratas por inmiscuirse (López Obrador) en apoyo de la izquierda en Bolivia, Perú y Ecuador”.

AMLO, de acuerdo con el medio estadounidense, debe parte de su popularidad a las reformas económicas de sus antecesores que han permitido la inversión extranjera y el fortalecimiento del peso, junto con la creación de empleos; todo lo contrario a las políticas del populista huésped de Palacio Nacional, cuyas políticas sin pies ni cabeza “ponen en riesgo este progreso económico”.

“El gobierno prevé un déficit fiscal del 5.9% del PIB este año a pesar de una economía en crecimiento. Espera reducir el déficit a la mitad para 2025”, resalta la editorial.

Asimismo, el rotativo apunta que López Obrador además de un triunfo de Sheinbaum, espera que Morena consiga la mayoría en el Senado y la Cámara de Diputados, para “despejar el camino para modificar la Constitución y revertir la apertura de 2014 de los mercados energéticos de México, erosionar la independencia de la Corte Suprema y las autoridades electorales, y eliminar los reguladores independientes”, puntualizan.

El WSJ asegura que “una alta participación ayudaría a (Xóchitl) Gálvez”, por lo que el Gobierno Federal está lanzando a través de “sus aliados mediáticos” el mensaje de que la elección ya está definida, cuando no es así e incluso muchas encuestas marcan una tendencia engañosa.

“El sesgo de muestreo y el potencial de un gran voto oculto aún podrían dar la sorpresa. El futuro de la democracia mexicana puede depender de mantener un control sobre los designios de AMLO”, subraya la opinión del WSJ.