Los cambios anunciados a la Carta Magna por el mandatario llevan un mensaje claro, es la lista de la agenda electoral en la que debe insistir la abanderada de la 4T, Claudia Sheinbaum, en la campaña donde el objetivo es hacer eco de las inconformidades que han apretado en las decisiones de López Obrador
Sin quitar el dedo del renglón en su intención de realizar cambios a rubros que le darán más relumbrón a sus políticas y programas sociales, así como poner un alto a sectores que le incomodan y que desde su punto de vista, sin presentar pruebas, califica como creación de gobiernos neoliberales e inútiles, el populista presidente Andrés Manuel López Obrador, fiel a su protagonismo como show-man y a ser focos de los reflectores, organizó un espectáculo en Palacio Nacional donde presentó un paquete de 20 controversiales reformas a la Constitución, donde anuncia cambios a los salarios, al sistema de pensiones, cambios al poder judicial, la desaparición de órganos autónomos, la composición del Congreso y que la Guardia Nacional quede al mando de la Secretaría de la Defensa Nacional, entre otros.
Las polémicas reformas de López Obrador no pasan de ser un discurso publicitario para mantener vigente su imagen y discurso, toda vez que ante la falta de estrella de su abanderada a la presidencia, Claudia Sheinbaum, él ha salido al quite para hacer la labor de representante del proselitismo de la 4T.
Los cambios anunciados a la Carta Magna por el mandatario llevan un mensaje claro, es la lista de la agenda electoral en la que debe insistir la abanderada de la 4T, Claudia Sheinbaum, en la campaña donde el objetivo es hacer eco de las inconformidades que han apretado en las decisiones de López Obrador
Las 20 reformas anunciadas este lunes, las últimas que presenta el populista mandatario y que definirán los trabajos de la 65 Legislatura en el Congreso de la Unión destacan algunas por su polémica, aunque otras al parecer hubo razonamiento o una verdadera asesoría para que no se anunciaran disparates:
- Reconocer a comunidades indígenas y afroamericanas como sujetos de derecho público.
- Reafirmar el derecho de personas adultas a recibir una pensión universal del Estado y a personas con alguna discapacidad.
- Otorgar becas a los estudiantes de todos los niveles de educación.
- Atención médica integral y gratuita para todos los mexicanos.
- Que trabajadores y sus familias sean dueños de sus viviendas.
- Prohibir el maltrato de animales.
- Impedir la fractura hidráulica o ‘fracking’, prohibir maíz transgénico. Negar concesiones para la minería a cielo abierto.
- El Estado está obligado a garantizar el derecho de los ciudadanos a acceder a internet.
- Hacer respetar las zonas con escasez hídrica y permitir solo el uso doméstico de agua.
- Prohibir el comercio de vapeadores y drogas químicas como el fentanilo.
- Que el aumento al salario mínimo no sea nunca menor a la inflación general anual.
- Asegurar que las pensiones de los trabajadores retirados sean del 100 % de su último sueldo.
- Garantizar el trabajo en jóvenes con hasta un salario mínimo por un año mientras se capacitan.
- Dar un jornal seguro y permanente a campesinos.
- Utilizar los 18.000 kilómetros de vías férreas para el transporte de pasajeros.
- Reducción de gastos a partidos políticos, eliminar candidaturas plurinominales y reducción de legisladores del Congreso: 300 los diputados (de los 500 actuales) y 64 senadores (de los 128 actuales).
- Que consejeros y magistrados electorales, así como jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial sean elector por voto popular.
- La Guardia Nacional regresa al control de las Fuerzas Armadas.
- Convertir en política de Estado la austeridad republicana.
- Eliminar dependencias y órganos autónomos.