Ahora Arroyo aparece aquí. Alabado acróbata anunciado, acomodadito; astronauta autista asomado al alfeizar. Afanes auspiciadores aceleran abdicación apenas al arranque.
Anteriormente acumulaba alforjas agregadas, apretaba ábacos; alababa al adalid, acomodaba acciones ante acaudalados avaros; argentarios agachones, arcones aduaneros, agentes aduanales.
Ahora arenga adherentes azules aquí, allá, acullá; anhelar apoyos, acometer asambleas autóctonas, alucinadas, acumular abalorios, acechar; atacar abadesas altaneras; acusar acerbas aproximaciones, aguardar alejandrinas atenciones. Ayer, anteayer.
Así, Arroyo atrasado avanza apenas, acicalado, achuchado, aletea afanoso. ¿Alza alas? ¡Adios! Arroyo arrepentido, alicorto, alicaído, ahíto. Alarife audaz, albañil arrebatado; arquitecto apoltronado, arzobispo ahuevonado.
Año adivinado, anualidad auspiciadora. Analiza, Arroyo, analiza.
Ahorita apenitas apuntas autonomía. Ahorras altísima asta al avecindado anganguense asiático.
–¿Alcanzarás a aquellos aupados? ¿Abandonarías ametralladoras asesinas?
Algunos abominan abundancia ajena. Amparado al alba anticipas amilane; anoréxicas antagonistas agravan animadversión, avatares antiguos. Arpías acosadoras, alevines aléxicos; ágrafos, aleznas, alacranes al antebrazo; axiomas apadrinados. Acúsalos.
–¿Amo?
–Aquí ando. Arriba, adelante anunciaba antañón, artero alfil, anginas agotadas.
–¿Ahora apunto al aire?
–Apunta al alce, al atún, a alguna alacena; arranca alamud. Apura aljibe alcoholizado. Arrobas arroceras.
–¿Alcanzo adversarios?
–Asnos aparecen al alba. Ataca Aznar, abunda Aristóteles. Alza antenas aburridas, asiste ancianas, acumula azulejas ambiciones. Aspereza apenas albergará arañas apuñaladas. Así, amigo, apúrate, apuntíllalos”.
Arte algebraico acomodaron árabes aviesos, alternativos albornoces alquimistas azogados. Anfictionía alejada aún aterciopela aguas amarillas. Alelados andábamos. Aprieta agujetas, alza arcos; alcaldes atrabancados aguardan almonedas. Australianos andan ancas arriba. Alcatraces al aceite; alhelíes abandonados.
Alumbremos amaneceres, ahorquemos al atracador ahora amoroso, acariciador amorosísimo. Andas apachurrando acémilas; animales antediluvianos: anfisbenas, anfineuros, “adasaurus”,” anfenimimos”. Allá aparecían.
–¿Asumes acabar al “antropoPRItecus, acometerías afán apostólico? ¡Arriesgate! Admiraron a Alemán, a Anastasio Aranda, a Alamán, a Arango.
Anencefálicos, aburridos, antropólogos abyectos. Activación absurda, aburrimiento argentino: ¡Atorrantes! acamalan aceitunas, abruman alcahuetes, alguaciles, apéndices afectados, alcaides arraigados.
Abramos ases, abanicos agujerados; América atasca Azteca; Arlindo acomete arco, aparato ambarino, ¿alcanzas angstromio?, aureo adarme, albaricoque anillado. Abel asesinado; Adán abrumado.
–¡Arúspice! ¿Alcanzo agosto?
–AMLO aburre, anona agusanada. Autoridades admiten anuncios, asambleas amplísimas, acarreos abrumadores. Arrodillados alzan Ave a alejadas alturas. Arrastran ácidos aceites, alumbran aparatos.
Acabaríamos al alba. Agua al alambre, alpargata apisonada.
Azulejos acaudalados amamantan al aspirante. Aerolíneas abandonadas; aeromozas al ajillo. Anteproyecto alabado antenoche, ahorca ahora. Anillos amotinados. ¿Acción asociada?
Atendí al amateur, abono aires al agitanado: anublado, “apiolao”, avanza “argandí”. ¿Organdí? Alá atiende.
Aspas asesinas; abejas aburridas, arpistas al acabar, arqueros al asalto apestan arena. Abanto acomete “Azafrán”. Axis acomodado, algoritmos azufrosos arrastran almenas, alcázar alejado.
Ahora abrumado ante adversidades, alelado aguantas agujeros atacas al Atlacomulco.
¿Adivinas?
Aquí acabo. Agoto agallas apunto apenas alfónsigos alejados. Advierto alfileres aleatorios, antros abiertos. ¡Abracadabra! Aladino, adversidades alejandrinas.
Adiós, Arroyo, abur.