Ante la enjundia de los políticos tabasqueños, su indeclinable verbosidad, su proclividad al escándalo, la gritería y el abundante repertorio de sus exabruptos, excesos, florituras y la oratoria sin reposo, algunos dicen por allá:

–“En una discusión política en Tabasco si alguien respira primero”.

Y esa condición de discurso interminable ha sido evidente para todos en el caso de Andrés Manuel: lleva 25 o 30 años con el mismo discurso y no se ha cansado de repetirlo. Otros nos se han cansado de oírlo.

Algunos llamarán a eso monotonía. Otros le dirán escasez de ideas. Algunos más lo criticarán por terco y no faltará quien lo señale como obsesivo compulsivo. Pero la verdad (aun cuando todo lo anterior fuera cierto) es mucho más meritoria: es de los escasos políticos congruentes. No ha variado un ápice sus convicciones ni sus intenciones. Eso lo hace un tipo congruente y por tanto resistente, insistente, inclemente y todo lo demás.

Sin embargo la política no suele premiar esos valores. No se premia la obra; se ponen laureles a la maniobra.

La condición inherente al juego por el poder implica sinuosidad, mudanza y olvido de hoy en cuanto a las palabras de ayer. El mismo AM –dirán algunos-, comenzó en el PRI y ahora ha fundado una asociación civil con apariencia de partido político cuya finalidad mayor no es evitar una segunda derrota a manos de Acción Nacional sino del PRI, cuyo regreso al poder sería (dice él) el “santanismo” del siglo XXI.

La pregunta es si la movilización nacional a la cual ha convocado AM podrá hacer de él un candidato visualmente atractivo como exige y requiere una sociedad proco inclinada a la molesta costumbre de pensar. En un mundo dominado por las imágenes poco caso tiene hundirse en la reflexión. ¿Para qué? No tiene sentido pensar si los profetas de la pantalla ya lo han hecho por todos los demás.

Tan sabe AM el poder de la TV como para salir trajeado y con bien anudada corbata en la pantalla para jurar y perjurar su respeto a los “buenos empresarios” y su condena contra quienes actúan de manera diferente y Llevan al país al infierno de la minoría rapaz cuyas acciones confiscaron el patrimonio mexicano. La única dificultad para poner en práctica el programa de López consiste en la indispensable, necesaria e ineludible decapitación de la oligarquía. Fácil. Tenemos demasiadas “Maríantonietas” y nadie para accionar la guillotina.

Pero a fin de cuentas no será la búsqueda peregrina del voto y la conciencia el elemento real en la decisión de la(s) izquierda(s) para ver quién lleva su bandera en las elecciones del año entrante.

La decisión será tomada –insisten— de la manera menos izquierdista imaginable: por el resultado de una encuesta, herramienta fundamental en la investigación del mercado y por cuya ciencia y presencia se modifican, anuncian o tuercen las decisiones de quienes las mandan hacer.

El más grande horror de este tipo de encuestas fue cometido hace unos años por los priístas rejegos contra otro tabasqueño, Roberto Madrazo. Los inconformes, mediante una encuesta tan falsa como un maullido de perro, quisieron entronizar a un oponente a la candidatura “oficial” del PRI y llevaron el “Tucom” a la fractura por cuyo crujido acabaron todos en tercer lugar, excepto Arturo Montiel –promotor de la encuesta–, quien acabó en cuarto.

BANDERA BLANCA

Más allá de las divergencias partidarias con el presidente Felipe Calderón, el secretario de Salud de Tabasco, Luis Felipe Graham anda contento y esperanzado. Para nadie son secretas sus aspiraciones en cuanto a la sucesión del devaluado gobernador Andrés Granier y el izamiento de la andera Blanca; es decir, la cobertura completa de los servicios de salud comprendidos en el Seguro Popular en el estado, resulta un mérito parcialmente suyo, como también la administración de los nuevos centros hospitalarios, en Comalcalco y Jonuta.

ABSURDO

Gritan en las nubes los integrantes del “sector aeronáutico” mexicano, una especie de Flota Boliviana de Portaviones y Acorazados.

Clan por el cierre de nuestros cielos pues no habría reciprocidad para nuestras aeronaves si a los extranjeros se les abren (más) las rutas de par en par. Eso es cierto pero aun cuando hubiera reciprocidad: ¿donde están las líneas aéreas mexicanas? No hay. En este gobierno desaparecieron más de media docena de ellas.

Ese es uno de los grandes fracasos del panismo: o pudieron hacer un aeropuerto ni conservar una industria aeronáutica. Todos somos almirantes bolivianos, gatos siameses azules y aviones sin alas.

HABITO

No sé a los demás pero a mí ya se me hizo costumbre cada mes felicitar a José Emilio Pacheco por otro premio. Ya los tiene todos. Menos la cena en casa de Don Alfredo. Pronto, quizá.

4octubre11cronica

EL CRISTALAZO

Cosas de Tabasco

RAFAEL CARDONA

(epígrafe) Felicidades a Jimena 33

Ante la enjundia de los políticos tabasqueños, su indeclinable verbosidad, su proclividad al escándalo, la gritería y el abundante repertorio de sus exabruptos, excesos, florituras y la oratoria sin reposo, algunos dicen por allá:

–“En una discusión política en Tabasco si alguien respira primero”.

Y esa condición de discurso interminable ha sido evidente para todos en el caso de Andrés Manuel: lleva 25 o 30 años con el mismo discurso y no se ha cansado de repetirlo. Otros nos se han cansado de oírlo.

Algunos llamarán a eso monotonía. Otros le dirán escasez de ideas. Algunos más lo criticarán por terco y no faltará quien lo señale como obsesivo compulsivo. Pero la verdad (aun cuando todo lo anterior fuera cierto) es mucho más meritoria: es de los escasos políticos congruentes. No ha variado un ápice sus convicciones ni sus intenciones. Eso lo hace un tipo congruente y por tanto resistente, insistente, inclemente y todo lo demás.

Sin embargo la política no suele premiar esos valores. No se premia la obra; se ponen laureles a la maniobra.

La condición inherente al juego por el poder implica sinuosidad, mudanza y olvido de hoy en cuanto a las palabras de ayer. El mismo AM –dirán algunos-, comenzó en el PRI y ahora ha fundado una asociación civil con apariencia de partido político cuya finalidad mayor no es evitar una segunda derrota a manos de Acción Nacional sino del PRI, cuyo regreso al poder sería (dice él) el “santanismo” del siglo XXI.

La pregunta es si la movilización nacional a la cual ha convocado AM podrá hacer de él un candidato visualmente atractivo como exige y requiere una sociedad proco inclinada a la molesta costumbre de pensar. En un mundo dominado por las imágenes poco caso tiene hundirse en la reflexión. ¿Para qué? No tiene sentido pensar si los profetas de la pantalla ya lo han hecho por todos los demás.

Tan sabe AM el poder de la TV como para salir trajeado y con bien anudada corbata en la pantalla para jurar y perjurar su respeto a los “buenos empresarios” y su condena contra quienes actúan de manera diferente y Llevan al país al infierno de la minoría rapaz cuyas acciones confiscaron el patrimonio mexicano. La única dificultad para poner en práctica el programa de López consiste en la indispensable, necesaria e ineludible decapitación de la oligarquía. Fácil. Tenemos demasiadas “Maríantonietas” y nadie para accionar la guillotina.

Pero a fin de cuentas no será la búsqueda peregrina del voto y la conciencia el elemento real en la decisión de la(s) izquierda(s) para ver quién lleva su bandera en las elecciones del año entrante.

La decisión será tomada –insisten— de la manera menos izquierdista imaginable: por el resultado de una encuesta, herramienta fundamental en la investigación del mercado y por cuya ciencia y presencia se modifican, anuncian o tuercen las decisiones de quienes las mandan hacer.

El más grande horror de este tipo de encuestas fue cometido hace unos años por los priístas rejegos contra otro tabasqueño, Roberto Madrazo. Los inconformes, mediante una encuesta tan falsa como un maullido de perro, quisieron entronizar a un oponente a la candidatura “oficial” del PRI y llevaron el “Tucom” a la fractura por cuyo crujido acabaron todos en tercer lugar, excepto Arturo Montiel –promotor de la encuesta–, quien acabó en cuarto.

BANDERA BLANCA

Más allá de las divergencias partidarias con el presidente Felipe Calderón, el secretario de Salud de Tabasco, Luis Felipe Graham anda contento y esperanzado. Para nadie son secretas sus aspiraciones en cuanto a la sucesión del devaluado gobernador Andrés Granier y el izamiento de la andera Blanca; es decir, la cobertura completa de los servicios de salud comprendidos en el Seguro Popular en el estado, resulta un mérito parcialmente suyo, como también la administración de los nuevos centros hospitalarios, en Comalcalco y Jonuta.

ABSURDO

Gritan en las nubes los integrantes del “sector aeronáutico” mexicano, una especie de Flota Boliviana de Portaviones y Acorazados.

Clan por el cierre de nuestros cielos pues no habría reciprocidad para nuestras aeronaves si a los extranjeros se les abren (más) las rutas de par en par. Eso es cierto pero aun cuando hubiera reciprocidad: ¿donde están las líneas aéreas mexicanas? No hay. En este gobierno desaparecieron más de media docena de ellas.

Ese es uno de los grandes fracasos del panismo: o pudieron hacer un aeropuerto ni conservar una industria aeronáutica. Todos somos almirantes bolivianos, gatos siameses azules y aviones sin alas.

HABITO

No sé a los demás pero a mí ya se me hizo costumbre cada mes felicitar a José Emilio Pacheco por otro premio. Ya los tiene todos. Menos la cena en casa de Don Alfredo. Pronto, quizá.

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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