El jueves de la semana pasada, mucho antes de la imaginaria consulta de Fernando Larrazabal con la cual convirtió la oficina del jefe nacional del PAN en su urinario privado, esta columna dijo:

“Con la intromisión en la continuidad de los gobiernos municipal de Monterrey y estatal de Nuevo León, Gustavo Madero, presidente del Partido Acción Nacional, va de manera acelerada rumbo al peor lugar para un político: el ridículo. Ni Larrazabal le hizo caso”. La consulta fue 48 horas más tarde.

El sábado, con la cara dura más dura de los últimos tiempos, el alcalde de Monterrey lanzó una sonora trompetilla a la esquina de José María Rico y Avenida Coyoacán en la ciudad de México. El ruido taladró las ventanas, subió por las escaleras, horadó los castos oídos de don Gustavo y lo mandó a ese lugar tan mencionado en el habla popular mexicana. Pero él ni siquiera se inmutó.

En cambio el candidato oficial de Los Pinos, don Ernesto Cordero, inició su campaña de manera muy imaginativa: convocó a, los militantes a ponerse los “pantalones de uso rudo” para combatir al Partido Revolucionario Institucional.

-¿Cuáles son esas prendas de acendrada rudeza y cual el valor político de ser rudo, rudo? ¿Los vaqueros de mezclilla? ¿Los azules de los mineros o los bombachos de un karategui?

No importa. Lo rudo es la convocatoria.

Hubiera sido un llamado más oportuno la semana pasada para ver si el presidente del Partido Acción Nacional se fajaba los suyos antes de recibir ahí, de donde sangraba el caballo blanco, el guantón de un simple presidente municipal. Nada más ha dado una muestra de su potencia política: no puede ni con un edil y además de su partido.

Evidentemente fue una mala ocurrencia querer disminuir al priísmo mediante el sacrificio de uno de los suyos. En la lógica fallida del panismo neoleonés, la renuncia de Larrazabal hubiera hecho crecer la presión contra el gobernador Rodrigo Medina a quien sería más fácil echar abajo o al menos estimular la convocatoria para un juicio político.

Para como están las cosas los panistas no deberían estar pensando fajarse los pantalones rudos o sedosos como la taleguilla de un torero contra el PRI, sino contra sus “cuadros” indisciplinados.

No olvidemos cómo hace poco tiempo Fernando Larrazabal le alzaba la mano a Ernesto Cordero en un movimiento avanzado de coordinación de la inminente campaña en el norte del país. Eran días de vino y rosas, mucho tiempo antes del incendio entre cuyas pavesas brillan todavía los rescoldos de un prestigio perdido.

ZACATECAS

La Universidad de Zacatecas, como lo hace desde hace ya casi tres sexenios, publicó los resultados de su evaluación (basada en encuestas) del primer año de un gobierno. En este caso las notas no podían ser mejores para Miguel Alonso cuyo informe, por cierto, lo mostró hace unos días como uno de los hombres de confianza y cercanía de Enrique Peña Nieto.

Pero independientemente de eso; cuya condición anecdótica quizá no les importa a los zacatecanos a la hora de calificar su gestión, la Universidad dice:

“En octubre 2010, un 67% contestaba APRUEBA a la pregunta de “¿Usted aprueba o desaprueba el trabajo realizado hasta el momento por Miguel Alonso Reyes?”.

“En septiembre (2011) un 76% de la población del estado de Zacatecas aprueba su gestión. Es decir, durante su primer año de gestión, el gobernador aumenta nueve puntos porcentuales en la percepción aprobatoria de los zacatecanos. Por otro lado, la calificación numérica es aprobatoria, con cifras estadísticamente iguales en estas dos fechas. Mientras que en octubre tenía 7.6 de calificación, en septiembre de este año se encuentra un 7.5., lo cual es igual si se toman en cuenta los márgenes estadísticos”.

El único gobernador por encima de Reyes es Rafael Moreno Valle, de Puebla. El peor calificado de todos los de la tabla (12) es el priísta Mariano González Zarur, con 6.9. Moreno Valle tiene 7.6.

PRESUPUESTO

Lacónico y directo Manlio Fabio Beltrones ha calificado con un simple “más de lo mismo” el presupuesto; trabajo postrero de Ernesto Cordero.

“Desafortunadamente vemos una conducta inercial en el diseño del paquete económico, sin disposición para discutir la reforma hacendaria y que subestima el impacto de la desaceleración estadounidense y la incertidumbre económica global.

“El país requiere de un presupuesto innovador que evite que por obsesiones electorales se posponga la racionalización del sistema hacendario y se ignoren las inquietudes de la población por el alza de alimentos y el desempleo”.

PERSONAL

Hace 40 años Guillermo Chao y yo, con el barro hasta las rodillas, reporteábamos el Festival de Avándaro. Trabajábamos juntos en LA PRENSA y disfrutábamos una felicidad profesional nunca vista después.

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona

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