Las tensiones entre México y Estados Unidos también se han intensificado, con el exfuncionario argumentando que las acciones del gobierno buscan encarcelar a opositores políticos

Todo indica que la situación de Genaro García Luna por fin tendrá un desenlace cuando conozca su sentencia este miércoles 16 de octubre. Esta sentencia oscila entre la cadena perpetua, como lo solicita la fiscalía, o los 20 años a los que se aferra su defensa. García Luna, mano derecha del expresidente Felipe Calderón en la lucha contra el narcotráfico, inició un largo juicio que se ha postergado considerablemente desde 2023, cuando fue señalado culpable por delitos relacionados con el narcotráfico y su presunta colaboración con el Cártel de Sinaloa.

El juez de Nueva York, Brian Cogan, es el encargado de dar punto final al caso de Luna. Entre los cargos que enfrenta el exfuncionario mexicano destacan la conspiración para traficar cocaína y delincuencia organizada, delitos que habría cometido mientras desempeñaba sus funciones como secretario de Seguridad.

García Luna fue arrestado en diciembre de 2019 y desde entonces ha permanecido en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn. En este lugar ha ganado la simpatía de algunos reclusos, quienes han redactado cartas dirigidas al juez Cogan para solicitar clemencia por García Luna. Sin embargo, estas peticiones parecen no haber surtido efecto en el tribunal, que considera necesaria una cadena perpetua dado el impacto de sus acciones en la lucha contra el narcotráfico y el daño a la confianza pública.

Los últimos intentos del exsecretario de Seguridad de México por postergar el juicio han sido la redacción de dos cartas. En la primera, García Luna defiende su inocencia y acusa al expresidente Andrés Manuel López Obrador y al Gobierno de México de fabricar pruebas para conspirar en su contra. La segunda carta, publicada este 15 de octubre, sugiere que las acciones del exmandatario mexicano buscan encarcelar a todo opositor político de la llamada Cuarta Transformación, provocando una «gran convulsión» en el país, y argumenta que el Poder Judicial ha sido desmantelado por AMLO.

También menciona que las tensiones entre México y Estados Unidos han alcanzado un nuevo nivel, refiriéndose a una «pausa-suspensión de relaciones oficiales» entre ambas naciones. Según su versión, esta interrupción pone en riesgo la cooperación en temas clave como la seguridad regional y el combate al narcotráfico.

García Luna ha sido un personaje polémico en la política mexicana, y su caso ha suscitado un intenso debate sobre la corrupción y los vínculos entre el narcotráfico y el gobierno. En 2013, la revista Forbes lo incluyó en su lista de los «10 mexicanos más corruptos», lo que subraya la magnitud del impacto que ha tenido su figura tanto en México como en el extranjero.

Este miércoles, el juez Cogan tomará la decisión final sobre la condena de García Luna, quien ha expresado su intención de apelar cualquier sentencia adversa y continuar luchando por demostrar su inocencia. Sin embargo, la fiscalía sostiene que los crímenes cometidos por el exfuncionario son de tal magnitud que una condena de por vida es el único castigo apropiado.

Con esta decisión, se marcará el cierre de uno de los juicios más importantes para la justicia estadounidense en relación con un exfuncionario mexicano, cuyo nombre quedará ligado para siempre a la guerra contra el narcotráfico y las sombras de la corrupción.