El subcomandante Marcos critica la reforma al Poder Judicial propuesta por López Obrador, comparándolo con expresidentes autoritarios y acusando tanto al gobierno como a la oposición de perpetuar un sistema corrupto
El subcomandante Marcos, conocido miembro del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), ha lanzado una dura crítica al presidente Andrés Manuel López Obrador y su propuesta de reforma al Poder Judicial, comparando al mandatario con expresidentes mexicanos a quienes acusa de autoritarismo, corrupción y otras deficiencias políticas.
En un texto titulado «El Viaje», publicado por el EZLN, Marcos comparó a López Obrador con figuras históricas como Gustavo Díaz Ordaz, a quien asocia con el autoritarismo, y José López Portillo, cuyo legado considera marcado por la «demagogia corrupta». Estas comparaciones se extienden a otros expresidentes como Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, atribuyéndoles características que van desde la perversidad hasta la ignorancia.
Marcos acusó a López Obrador de gobernar con «el autoritarismo de Díaz Ordaz», la «perversidad de Salinas de Gortari» y el «militarismo» de Calderón, en una crítica que sugiere que el presidente actual está repitiendo patrones de gobiernos pasados que han sido ampliamente condenados en la historia reciente de México.
La reforma al Poder Judicial, propuesta por López Obrador, fue uno de los puntos centrales de la crítica del subcomandante Marcos. Según el líder zapatista, esta reforma no busca verdaderamente defender la autonomía del Poder Judicial, sino más bien es una «autodefensa» del oficialismo, insinuando que la reforma es un intento de consolidar el poder sobre un sistema judicial que describe como corrupto y servil.
Marcos también criticó a la oposición política, argumentando que su lucha contra la sobrerrepresentación en el Congreso no tiene como objetivo un equilibrio de poderes, sino simplemente aumentar el precio de sus decisiones políticas. Afirmó que la oposición, en su búsqueda de controlar el Poder Judicial, no pretende defender su autonomía, sino más bien asegurar su control sobre lo que describe como «el negocio de la justicia».
El texto, que ha generado amplio debate, no solo apunta a la administración actual, sino que también señala las complicidades de la oposición, a la que acusa de no ser una opción real para los votantes. Marcos subraya que figuras como Alejandro Moreno, conocido como «Alito», y otros líderes de partidos tradicionales no ofrecen alternativas viables, reflejando una crítica a la falta de opciones políticas genuinas en el panorama mexicano.