El plan, respaldado por el Comité Nacional Republicano durante una reunión en Washington D.C., también incluye medidas para fortalecer la seguridad fronteriza y la construcción de un «gran escudo defensivo contra misiles»
En un movimiento que refuerza su postura sobre la inmigración, el Partido Republicano de Estados Unidos ha aprobado un programa electoral que incluye la promesa de llevar a cabo la mayor deportación de migrantes en la historia del país. Esta propuesta se implementaría en caso de que Donald Trump, el candidato del partido, gane las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre.
El Comité Nacional Republicano (RNC, por sus siglas en inglés) respaldó un programa de 20 puntos que refleja la retórica antiinmigración que ha caracterizado a Trump desde su primer mandato. El plan, diseñado para un eventual segundo mandato de Trump, será formalmente presentado durante la convención nacional del partido que se llevará a cabo la próxima semana en Milwaukee, Wisconsin.
El centro del programa migratorio republicano es la promesa de «detener la invasión migrante» y ejecutar «la operación de deportación más grande de la historia» de Estados Unidos. Esta medida busca responder a la preocupación entre los votantes republicanos sobre el control de las fronteras y la presencia de inmigrantes indocumentados en el país.
Además de la deportación masiva, el programa incluye otras propuestas relacionadas con la seguridad. Entre ellas, se destaca la construcción de un «gran escudo defensivo contra misiles» similar a la Cúpula de Hierro de Israel, y la deportación de «radicales pro-Hamás» que participen en protestas universitarias. Estas medidas buscan reforzar la percepción de seguridad y control dentro de las fronteras estadounidenses.
La implementación de estas políticas tendría un impacto significativo en la comunidad migrante. Las familias indocumentadas enfrentarían la amenaza de deportación, lo que generaría un clima de incertidumbre y temor. Las organizaciones de derechos humanos y defensores de los migrantes han criticado duramente estas propuestas, calificándolas de inhumanas y contrarias a los valores de acogida que históricamente han definido a Estados Unidos.
Las reacciones a estas propuestas han sido diversas. Mientras que los sectores más conservadores del Partido Republicano aplauden la firmeza de Trump en temas migratorios, los críticos advierten sobre las consecuencias humanitarias y económicas de una deportación masiva. Los demócratas, por su parte, han señalado que estas medidas extremas no abordan las causas subyacentes de la migración y sólo exacerban el sufrimiento de miles de familias.
El enfoque en la migración promete ser uno de los temas centrales en la campaña electoral. La unidad dentro del Partido Republicano en torno a Trump contrasta con las divisiones dentro del Partido Demócrata, donde el presidente Joe Biden enfrenta crecientes cuestionamientos sobre su manejo de la inmigración y otras políticas.
Con la Convención Nacional Republicana programada del 15 al 18 de julio en Milwaukee, el partido formalizará su respaldo a Trump y a su agresivo programa migratorio. Esta elección se perfila como una de las más polarizadas de la historia reciente, con la migración como uno de los temas más divisivos y debatidos.