El zarpazo gubernamental para apropiarse de los fondos privados de personas no reclamantes de sus haberes en cuentas de ahorro para el retiro, se sustenta en una vana esperanza cuya pronunciación quiere ocultar el verdadero motivo de todo esto: la hacienda no tiene dinero y lo va a sacar de donde le plazca, siempre y cuando encuentre un buen pretexto.
Aquí la causa imaginaria es crear un fondo de pensiones para el bienestar cuya novedosa administración permita a quienes lo necesiten pensionarse con el cien por ciento del monto de su último salario… siempre y cuando no pase de los 16 mil pesos. Una miseria de todos modos.
Ese fondo –administrado por el Banco de México y resguardado en un fideicomiso (similar a los muchos diluidos por el gobierno en su desmedida voracidad financiera con el disfraz de la austeridad republicana) aumentará su volumen financiero con las ganancias del Tren Maya y los haberes decomisados y distribuidos por el instituto para la devolución de lo robado (o sea, roben mucho para tener fondos y distribuirlos cuando se devuelva lo robado) — está en verdad construido sobre arena. Y básicamente arena mentirosa.
“…¿De dónde sacar el dinero para ese fondo?
“Resulta que nos encontramos que las afores tienen dinero, manejan dinero de quienes no han cobrado sus pensiones y ellos administran esos fondos aun cuando ya por ley deberían de entregar esos fondos al seguro social, y no entregan los fondos.
Entonces, lo que se está ahora discutiendo, y queremos que se apruebe, es que las afores entreguen esos fondos para compensar a los trabajadores que se van a jubilar y que deben de recibir el 100 por ciento de su salario. Pero como hablamos de cerca de 40 mil millones de pesos, pues se resisten y ahí están todos los medios de información convencionales; no todos, hay honrosas excepciones. Pero sobre todo los columnistas que reciben moches de los grandes bancos y de los que manejan las afores, diciendo que nosotros queremos quitarles los afores a los trabajadores, cuando es exactamente lo opuesto…”
Pero no todos opinan igual: Mario Zamora, senador por Sinaloa:
«Si algo hemos aprendido es lo perverso y los cínicos que es la gente de Morena. Qué curioso: mandan tres iniciativas, una a diputados y dos a senadores, que ya de por sí sola cada una tiene distintas consecuencias y lesivas…
«…Pero déjame hacer de abogado del diablo, y conociendo lo perversos que son: en diputados mandan lo de los Afores, estás hablando de una bolsa de 40 mil millones de pesos. ¿Cómo me robo 40 mil millones? Allá apruebo lo de las pensiones y me robo 40 mil millones.
“En el Senado meten la de amparo para que nadie se pueda amparar, salvo de manera individual. Como ya me robé esa lana, y nadie se puede defender, con eso protejo al que se robó los 40 mil millones».
Y ayer, falsificaron el dictamen. La sesión seguirá hasta el lunes. Perversos y cínicos, les dice Zamora, quien sabe por qué.
VERACRUZ
Con plena conciencia del descenso de Rocío Nahle en las posibilidades de triunfo en Veracruz y del lastre de Cuitláhuac García (la etimología lo describe), Mario Delgado se va hoy a Veracruz para apuntalar a la candidata de Morena cuya campaña es como una chalupa con agujeros. Se le está metiendo el agua por todas partes.
De acuerdo con los cercanos, el problema (o uno de los problemas), es el carácter atravesado y de mal humor de doña Rocío quien todo lo quiere hacer ella, sin darle espacio ni oportunidad a los colaboradores quienes viven expuestas a reclamaciones por asuntos de los cuales se les ha excluido.
Por lo visto el mal talante cunde entre las morenistas. Agrias y malhumoradas todo el tiempo, gritonas, enojonas y quién sabe cuántas cosas más.