El populista mandatario deja la tranquilidad en Palacio Nacional y se ve obligado a estar en la zona cero de la tragedia por las demandas ciudadanas que exigen ayuda del gobierno y no migajas, como lo están haciendo

Catorce días después del impacto del huracán Otis en Acapulco, principal zona devastada, finalmente el populista presidente Andrés Manuel López Obrador dejará su zona de confort y en lugar de llegar a Chilpancingo estará en la zona cero de la tragedia, esto, tras reclamos de miles de damnificados que exigían su presencia dada la ausencia del gobernante, quien junto con la gobernadora morenista Evelyn Salgado han brillado por su ausencia y han dejado a su suerte a los afectados.

López Obrador considera actos de politiquería las demandas de los damnificados que tuvieron que salir de Acapulco para que el populista mandatario dejara la comodidad de Palacio Nacional y asista a la zona del desastre. El gobernante, a quien solo le interesa ganar adeptos con miras a las elecciones el 2024 acusa que las protestas de los damnificados son organizadas por la oposición que buscan dañar su imagen y la de Morena, partido que le ha fallado a los más pobres y que al igual que el viejo PRI, solo buscan su beneficio para seguir en el poder, que es su único interés.

“Ya hemos estado, con la visita de hoy, en tres ocasiones y lo digo porque los adversarios politiqueros han sostenido que no he ido a Acapulco, y fui desde el primer día y recorrí todo, hablé con la gente y me di cuenta de todos los daños y lo que había que hacerse para llevar a cabo el plan de reconstrucción”, dijo el mandatario, quien parece que la devastación causada por el ciclón no es cosa sería, pues ordenó a Diputados no destinar n un centavo del Presupuesto de Egresos de la Federación para reconstruir Acapulco.

El populista gobernante dijo que sostendrá una reunión a las 16:00 horas en la base naval de Acapulco, para evaluar la situación que sigue en nivel de crítica en el puerto, considerada por la 4T como la zona más afectada, sin tomar en cuenta comunidades de municipios que también fueron arrasadas y que ninguna autoridad ha visitado.

López Obrador ha desestimado las acusaciones de la oposición, que considera insuficiente el plan de reconstrucción de la Federación, al calcular en 61.313 millones de pesos el costo para las reparaciones y apoyos sociales en Guerrero.

«Tengo que decirle a la gente que están utilizando este lamentable caso de Acapulco con propósitos politiqueros (pues considera que dañan su imagen y la de Morena con miras a las elecciones del 2024), los que están en campaña, los que quieren regresar por sus fueros, los corruptos, los de la mafia del poder, los conservadores, que no se cansaron de robar”, señaló el mandatario quien busca de cualquier forma justificar su ausencia ante esta tragedia y sin mencionar por qué ordenó no abrir un fondo exclusivo para reconstruir Acapulco, mientras que a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) le dejan tres fideicomisos para seguir con sus operaciones, ello sin contar que en el presupuesto se le destinó una mayor partida que en años anteriores.

El mandatario dijo que su prioridad es atender a las 250.000 personas, según sus cálculos, que se quedaron sin vivienda, pero desconoce en realidad la magnitud real de esta tragedia, pues le ha dado por corregir informes para evitar mayores gastos al que él considera que será suficiente, y es que luego de que primero declaró a 47 municipios de Guerrero como zona de desastre por el huracán, a las pocas horas rectifica sin argumentos válidos que fue un error de la Coordinación Nacional de Protección Civil y que solo son dos los municipios muy dañados: Acapulco y Coyuca de Benítez.

El populista gobernante apuntó que «ya se están reabriendo centros comerciales, gasolinerías, se está avanzando hacia la normalidad», pero esto gracias a la iniciativa delos empresarios, más no por mediación del gobierno.

Asimismo, anunció que el miércoles se reunirá a las 10:30 horas con empresarios de turismo para avanzar en la meta de reabrir, «cuando menos», 35 hoteles para marzo o abril, para que estén listos para llevar a cabo el Tianguis Turístico, que es lo que le interesa, más no acelerar la recuperación de los acapulqueños que siguen a la buena de Dios, sin la ayuda suficiente de la 4T.