Los pocos asistentes al Estadio Azul calificaron de descortesía y acto grosero que la exjefa de Gobierno de la CDMX no atendiera su asistencia en el Estadio Azul

Como una total descortesía y un acto grosero por parte de Claudia Sheinbaum calificaron los pocos asistentes que llegaron al frustrado mitin de apoyo a la virtual abanderada de la 4T a la Presidencia en el Estadio de la Ciudad de los Deportes, escenario que lució vacío y que derivó en que la exjefa de Gobierno de la CDMX prefiriera cancelar el evento antes que agradecer a quienes acudieron para apoyarla y que aguantaron durante más de cinco horas para estar con ella. Sobre la responsabilidad por este fiasco ya comenzaron las acusaciones entre los aspirantes morenistas a la Jefatura de Gobierno capitalino, Clara Brugada y Omar García Harfuch, y es que sus equipos de campaña se responsabiliza de haber boicoteado el evento.

La desorganización y falta de unidad entre los equipos de campaña de Brugada y García Harfuch le asestaron un entripado y dolor de cabeza a Sheinbaum, quien esperaba llegar al Estadio Azul con alfombra roja y con gritos de presidenta, pero falló la organización del acarreo y muy contados llegaron a la cita, tal vez los que por iniciativa iban a dar su apoyo a la exmandataria capitalina, porque los morenistas condicionados a acudir a los eventos brillaron por su ausencia.

La búsqueda del culpable de este vergonzoso episodio en el historial político de Sheinbaum ya comenzó y se señala en primera línea a Sebastián Ramírez, dirigente de Morena en la CDMX y a quien apuntan de no tener la capacidad de organizar ni un mitin

Otros en la lista son la exalcaldesa de Iztapalapa, Claudia Brugada y el extituliar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, Omar García Harfuch, a quienes se responsabiliza de haber arrebatado a importantes números de acarreados con sus eventos y por sus diferencias de no acudir a determinados eventos de apoyo a la candidata a la presidencia, por existir preferencia s de apoyo hacia el exjefe de la policía.

Por lo pronto ya se agendó para el próximo 12 de noviembre otro evento en el mismo escenario, donde ahora sí, con dos semanas de anticipación no habrá pretextos para cumplir con el masivo acarreo al estilo del viejo PRI y que afianza Morena.