El caso Ayotzinapa, el prometido Censo de personas desaparecidas y el esclarecimiento de la “Guerra sucia”, mucha pieza que el exfuncionario de Segob no tuvo idea de cómo resolver

Su labor al frente de la subsecretaria de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación dejó mucho que desear, con más dudas que claridad en varios asuntos que a más de cinco años de gobierno del populista mandatario Andrés Manuel López Obrador siguen empantanados, con nulos resultados como en la desaparición de los 43 normalista de Ayotzinapa, el censo de personas desaparecidas de las que no hay nada y sobre la resolución de casos de la “Guerra sucia” que también está en punto muerto. Su nula tarea en la Segob fue premiada al enviarlo al equipo de Claudia Sheinbaum, virtual candidata de la 4T a la presidencia en 2024, y se suma a otro “muñeco de escaparate” como es Gerardo Fernández Noroña, quien finge que hace pero no hace, ya que quien lleva las riendas de la campaña es Mario Delgado, por orden del patrón de Palacio Nacional.

Encinas estuvo en Gobernación desde el 1 de diciembre de 2018, cuando la titular de la dependencia era Olga Sánchez Cordero, de quien tampoco hay mucho que hablar. Se esperaba que los bonos de Encinas subieran como la espuma al tener como encargo principal desmarañar y dar respuestas en el corto plazo al aso Ayotzinapa, luego de que el populista mandatario, quien quiso adornar el momento y llevarse las palmas y reflectores como es costumbre, anunció el 3 de diciembre de aquel año que por decreto creaba la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia en el Caso (CVAJ) Ayotzinapa, cuya misión era conocer la verdad sobre la desaparición de los 43 normalistas la noche y madrugada de 26 y 27 de septiembre de 2014, pero esta tarea le quedó muy grande al ahora exfuncionario de Segob, quien a más de cinco años de esa encomienda no hizo más que acomodar lo ya escrito en la llamada “Verdad histórica” presentada por autoridades del expresidente Enrique Peña Nieto, sin aportar nada novedoso y tratar de presentarlo como si hubieran aportes inéditos.

Su desempeñó al acusar a los qe ya estaban acusados, entre ellos militares, gente del crimen organizado e incluso gente de la Policía de Seguridad Pública Federal, entre ellos Omar García Farfuch, no era algo nuevo y fue en lo que Encinas insistía, lo que desató reclamos de padres de los normalistas, que se han sentido decepcionados porque el caso, con la 4T sigue en punto muerto.

Encinas presentó dos informes en los que aseguró que no hay indicios de que los estudiantes siga vivos, lo que se supo desde un inicio y descartó que vínculos entre normalistas y el crimen organizado, lo que también no era novedad, a pesar de los rumores.

DESAPARECIDOS

Otro tema que nunca supo por dónde abordarlo fue el de la realización de un nuevo censo y a quien designar como nuevo o nueva titular de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), tras la renuncia de Karla Quintana, cargo que sigue acéfalo y con dirección sin rumbo.

El gobierno de la 4T supuestamente está levantando un nuevo censo de personas desaparecidas, pues considera que el número de personas que son buscados por sus familiares, a las que se suman reportes de estar ausentes y sin que se conozca su paradero no es mayor a los 112,000 como destaca el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y no Localizadas.

En México, donde hay reportes de más de 50,000 cuerpos sin identificar, se anunció con bombo y platillos la creación del Centro Nacional de Identificación Humana (CNIH), proyecto que solo se quedó en el discurso, ya que Encinas tenía esa encomienda, pero ni él ni el populista López Obrador se dignaron a reunirse y conocer las cifras de personas desaparecidas que tienen organizaciones y colectivos de buscadoras de personas desaparecidas en el país.

GUERRA SUCIA

Alejandro Encinas lo que menos quería era meterse en asuntos del pasado que generaran problemas estadísticos, y con el encargo de meterse a los archivos de la Guerra Sucia y presentar un informe se encontraba entre la espada y la pared, ya que esta nueva tarea era algo que le quitaba el sueño.

En octubre de 2021 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto con el que se creó la Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia de las Violaciones Graves a los Derechos Humanos cometidas de 1965 a 1990, encomendado al otrora subsecretario de Derechos Humanos de la Segob, y quien por supuesto dejó todo como al principio, sin avances claros, pese a haber presentado u informe en el que acusa a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de obstruir y ocultar información, lo que se sabía al haber implicación del Ejército en desapariciones y ataques contra grupos considerado subversivos y que afectaban la “paz y tranquilidad” que ofrecían los gobiernos federales. Encinas fue premiado por realmente hacer nada en Gobernación, donde su trabajo ha dejado más dudas que cosas positivas y que se suma al equipo de campaña Claudia Sheinbaum, donde el que dirige y decide es el líder nacional de Morena, Mario Delgado, con instrucciones de López Obrador, por lo que el exfuncionario de Segob se suma para ser otro adorno más en el equipo de la exjefa de Gobierno de la CDMX, tal y como lo hace el petista Gerardo Fernández Noroña, quien de vocero no tiene nada y solo es el repite discursos y agresor parlante contra la oposición o morenistas que han dado la espalda a la 4T.