“El objetivo no depende de la Refinería Olmeca, sino del Sistema Nacional de Refinación y que las seis plantas que operan actualmente en el país incrementen su utilización a más del 80% que es lo ideal”, dijo en entrevista con El Cristalazo, Ramses Pech, Ingeniero Químico y experto en la industria de los hidrocarburos, quien subrayó que por las próximas cinco décadas seguiremos dependiendo del petróleo

“El que un país sea autosuficiente en combustibles no quiere decir que por ello ya tenga soberanía, ya que una nación que busque la autosuficiencia debe saber para qué quiere los combustibles, tener en la mira cubrir una demanda y estar viendo una mayor dependencia de éstos, por lo que en México la apuesta es seguir utilizando el petróleo por las próximas cinco décadas, pero está muy lejos de ser autosuficiente”, señaló en entrevista con El Cristalazo Ramses Pech, Ingeniero Químico y experto en la industria de hidrocarburos, energía geotérmica, energía y economía.

El especialista fue certero al subrayar que las actuales afirmaciones del Gobierno Federal, de que en el país ya se está cerca de ser autosuficientes en la producción de gasolina, diésel y turbosina no son acertadas, ya que para alcanzar ese objetivo se requiere que las seis refinería operativas actualmente en el país, sin contar la Olmeca, en Tabasco, deben operar a un ritmo por arriba del 80 por ciento, cuando lo hacen a menos del 50 por ciento.

“Para ser autosuficientes en México no depende de la Refinería Olmeca (como el gobierno pretende que se vea), depende del Sistema Nacional de Refinación y que las seis plantas que tenemos actualmente; Minatitlán (Veracruz), Cadereyta (Nuevo León), Tampico Madero (Tamaulipas), Salamanca (Guanajuato), Salina Cruz (Oaxaca) y Tula (Hidalgo) puedan incrementar su utilización a más del 80 por ciento, que es lo ideal, y no a menos del 50 por ciento que es lo que actualmente producen”.

A través de un video en el que desmenuza el proceso ideal para que una nación logre la autosuficiencia en la producción de combustibles y de su propia autoría titulado “Dosis de energía y economía sin política”, el especialista en temas de hidrocarburo y refinación de crudo, subraya que si México quiere alcanzar ese objetivo no va a depender solo de una planta procesadora y productora de gasolinas, sino de todas las existentes que deben trabajar coordinadas en pos de esa meta.

RENTABILIDAD

“Las refinerías deberían estar operando en conjunto entre un 35 por ciento y el 80 por ciento para ser rentables, pero para tener una mayor cantidad de volumen y obtener una mayor cantidad de gasolinas y diésel y para ser autosuficientes deben aumentar su utilización, lo cual no se logra al haber una producción que no supera el 50 por ciento”, resaltó.

En el mismo tenor, el Ingeniero Químico aclaró que para que un país no dependa de las importaciones de combustibles debe alcanzar como punto ideal más del 80 por ciento en su producción y refinamiento de crudo, lo que en México está difícil de lograr.

“En el año 2021 el promedio de utilización de las seis refinerías era del 44,5 por ciento, en el año 2022 ésta se incrementó al 50,96 por ciento y en lo que va del 2023 se ha mantenido en no más del 50,64 por ciento, lo que es indicativo de que se está muy lejos en la refinación de crudo y producción de gasolinas”.

Ramses Pech explica con claridad que el lento procesamiento en la refinación de crudo pesado, que es el que se maneja en México, no solo lleva varias etapas para obtener combustibles, sino también, que este tipo de crudo afecta la metalurgia que tienen las seis refinerías y las daña, al grado que debe haber una importante inversión para su mantenimiento reemplazo, ya que de lo contrario se acortaría la vida útil de la maquinaria que ayuda en la refinación.

DETERIORO

“Las seis refinerías en el país han tenido un deterioro debido a que a la mayoría de ellas se les ha introducido una gran cantidad de crudo pesado, mismo que causa afectaciones y deterioros en la metalurgia de los equipos, ya que muchos de éstos, sino es que en la mayoría no estaban diseñados para procesar este tipo de crudo”, apuntó.

El experto en la industria de hidrocarburos explicó el por qué es tan dañino este crudo pesado y las afectaciones que provoca en los equipos que tienen las refinerías en el país y qué sucedería si no se da mantenimiento adecuado para mantener en condiciones óptimas la maquinaria. “El crudo que se introduce en las torres de destilación tiene una gran cantidad de azufres que pueden dañar la vida útil de los equipos, por lo que es necesario su remplazo o darles un buen mantenimiento correctivo, ya que durante el procesamiento del crudo se puede producir ácido clorhídrico, causante de una corrosión generalizada si no se reemplaza el equipo o se le da u mantenimiento adecuado”.

Sobre la producción de combustibles a partir de la refinación de crudo pesado, el especialista y asesor refirió que actualmente el Sistema Nacional de Refinación no está dentro de los valores idóneos que debería tener, lo que aleja cada vez más la meta de pensar en que algún día México será autosuficiente al tener una producción basta de gasolinas.

PRODUCCIÓN

“Desde el 2008 hasta julio del 2023 hemos visto que por cada barril de crudo que se mete en las seis refinerías del país se ha mantenido un porcentaje del 34 al 36 por ciento, es decir, si meto 100 barriles de crudo pesado para refinación voy a sacar 33 barriles de gasolina magna o de Premium”.

El Ingeniero Químico también subrayó que se espera producir a la voz de ya diésel de bajo azufre de menos de 15 partes por millón, que es el que se debe utilizar a partir del 2024 en todo México, ya que de acuerdo con las reglas del T-MEC (Tratado Comercial entre México-Estados Unidos y Canadá), es lo que se espera cumpla el Gobierno Federal, toda vez que es una de las controversias que exige este acuerdo entre los socios del T-MEC y que esperan que México cumpla con su parte.

Finalmente, Ramses Pech destacó que las seis refinerías activas que existen en México no fueron creadas para producir gasolinas, diésel o turbosina a partir de crudo pesado, pero la refinería Olmeca, en Tabasco si cuenta con la metalurgia para ello, pero esta planta sola no cubrirá el objetivo de autosuficiencia que se asegura y que nunca se cumplirá. “Dos Bocas fue creada para procesar crudo pesado y podría producir hasta los 340,000 barriles diarios, pero lo que frena esta meta es que su procesamiento es muy caro y muy contaminante, lo que ha elevado su costo en más de 18 mil millones de dólares”.