Hay pocas cosas tan lamentables como escuchar a Sheinbaum tratando de hacer campaña. Acartonada, chata y con voz de ventrílocuo, nadie duda que puede ganar la peculiar encuesta interna de Morena, pero la duda es si no se desplomará al enfrentarse a la oposición y ya hay datos duros que apuntan a esa posibilidad.
Marcelo Ebrard y su equipo, paralelamente al ataque a los acarreos de Sheinbaum, empiezan a ganar puntos de cara a la ciudadanía en general y exponen al interior del partido, el riesgo de no tener un candidato que compita por los votos, que sólo cuente con la bendición del Presidente.
La última encuesta de Massive Caller, lo mismo que una previa de El Financiero, muestran que el partido, Morena –y el respaldo a AMLO- es lo que vale de la candidatura de Morena y que Claudia no está agregando desde una posición privilegiadísima de corcholata consentida. Marcelo la alcanzó e incluso aparece más competitivo ante Xóchitl Gálvez en estos días en los que sus reclamos se han escuchado (ver gráficos).
Peor aún, en la medición de Massive Caller, los indecisos tuvieron un disparo espectacular de 10 puntos porcentuales. Eso significaría que los eventos de esta semana siembran dudas en muchos que probablemente antes se plegaban sin más a las decisiones del presidente en torno a que Sheinbaum sea la ungida para sucederlo. A la exjefa de Gobierno se le resquebraja ese dique de contención.
Morelos, una plaza que es una verdadera incógnita aún, lanzó esta semana una voz de alerta al respecto: allí Sheinbaum lleva semanas estancada, en tanto que Ebrard es el único que asciende en “los sondeos serios y profesionales”.
A la par, Marcelo en esa entidad ha instalado una estructura territorial de simpatizantes que visitan pueblos, colonias y barrios todos los días casa por casa y organizan pequeñas reuniones para conseguir apoyo al excanciller. Aún cuando Xóchitl Gálvez sume simpatías (y coseche de los desastres de Cuauhtémoc Blanco), Marcelo puede responder desde esa estructura. Sheinbaum no habría generado nada similar al usar sólo los acarreos, motivo de denuncias, para su campaña.
Aquí Marcelo está presente casa por casa, señalan los responsables morelenses de la campaña de Ebrard, y califican de “pequeña y básica” la operación ilegal de algunos presidentes municipales, “con recursos públicos”, incluyendo simulación y apoyo en redes sociales.
A la larga, señalan, lo que se verá es que el cascarón de Sheinbaum está vacío, en tanto que Marcelo Ebrard avanza.
Los consejeros de Morena Jonathan Capistrán, Patricia Torres, Ruby Vázquez, Dixxi María Salgado, Jesús Celón, Gloria Lázaro, entre otros, parte de las brigadas ebraristas, están pidiendo a la población morelense no tener miedo a señalar a Marcelo cuando se dé el momento de la encuesta.