El gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, aseguró que la posición de su Estado no ha cambiado, a pesar de que en la reunión en Pachuca trataron de obligarlos a comprometerse con la entrega, documento que el secretario de Educación estatal definitivamente no firmó
La convocatoria de los 32 secretarios de Educación Pública del país para estar presentes durante la LVIII Reunión del Consejo Nacional de Autoridades Educativas (CONAEDU) que se llevó a cabo en la ciudad de Pachuca, Hidalgo, el pasado 10 de agosto tuvo un solo objetivo, convencer y presionar a los representantes del ramo de todos los estados del país a firmar el compromiso de que sin trabas, se comprometerían a aceptar la entrega y distribución de los polémicos libros de texto de la 4T, lo que por supuesto, las ocho administraciones estatales que han marcado su posición de inmediato lo rechazaron.
La reunión estuvo encabezada por la titular de la Secretaría de Educación Pública federal, Leticia Ramírez Amaya, y por el gobernador anfitrión, el morenista, Julio Menchaca Salazar, quien no se cansaba de alabar cada palabra de la secretaria de Educación y de hablar mil maravillas de los nuevos libros de texto, de los que seguro no conoce sus contenidos.
Durante el encuentro predominaron los mensajes insistentes para que todos los titulares de Educación del país se comprometieran a que sin dilaciones ni trabas, se comprometían a que los polémicos libros llegarían a las aulas de las primarias y secundarias, por lo cual se insistió en que ese compromiso debería quedar firmado entre todos los presentes.
Sin embargo, los estados que han marcado ya su posición respecto a la no distribución de los ejemplares hasta que no se resuelvan los procesos jurídicos en proceso, evitaron tocar el asunto y evadieron cualquier insinuación para verse comprometidos.
Sobre este punto, el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, aseguró que la posición del Estado es a favor de no distribuir los libros de texto hasta en tanto se tenga una determinación judicial, nada ha cambiado, a pesar de que en la reunión de secretarios de Educación en Pachuca, trataron de obligar a Coahuila a comprometerse con la entrega, documento que el secretario de Educación estatal definitivamente no firmó, acción que también rechazaron otros estados como Aguascalientes, Chihuahua, Guanajuato, Nuevo León, Jalisco, Yucatán, Coahuila y Querétaro; Colima, único estado gobernado por Morena reiteró que aguardará la orden judicial y evitó firmar para no verse comprometido.
Respecto a la polémica generada por los nuevos libros de texto, el mandatario hidalguense, Julio Menchaca, aplaudió las supuestas políticas de innovación académica que plantea el gobierno de la 4T, y sin titubeos y sin previa consulta con los padres de familia ni maestros en su estado, dio por hecho que Hidalgo acompañará las estrategias que permitan garantizar una mejor educación para niñas, niños y adolescentes.
Por su parte, la titular de la SEP refirió en su mensaje que “nuestro objetivo es sacar adelante un proyecto educativo que permita el desarrollo de niñas, niños y adolescentes”, y resaltó que el próximo 28 de agosto, los libros de texto gratuito llegarán a las escuelas para ser utilizados por las y los estudiantes, motivo por el cual exhortó a las autoridades educativas de los 32 estados del país a desarrollar ejercicios de retroalimentación del trabajo realizado con estos.