Información de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, la Sedena y el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan destacan que la capital del estado los disputan Los Ardillos, Los Rojos, Los Jefes y el Cártel del Sur

En Guerrero la inseguridad detonada por grupos del crimen organizado abarca todo el estado, de norte a sur y de este a oeste, y prueba de ello es que los 4 mil 100 efectivos de la Guardia Nacional destacamentados en la entidad para seguridad pública, principalmente en Acapulco y Chilpancingo, ninguno de estos elementos desafía o se mete con grupo vinculados con el narco, por lo que sus funciones están centradas en el desalojo de manifestantes en la Autopista del Sol o por manifestarse frente a edificios del gobierno, denunció el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, al destacar que Chilpancingo se ha convertido en centro de operaciones y centro de disputa de cuatro cárteles locales.

La ONG subraya que uno de los puntos críticos de inseguridad por el control de alguna plaza es el que comprende la zona minera, que forma parte del cinturón de oro nacional y que es motivo de una guerra sin cuartel entre cárteles locales que tienen como rehenes a las compañías mineras, a sus trabajadores y a la población en general. En estos lugares la seguridad está en manos del crimen organizado que controla entradas a las comunidades, patrullan los caminos y cobran las cuotas a los comerciantes y transportistas.

De acuerdo con la ONG, los ciudadanos de zonas montañosas del estado ha constatado que la policía del estado y la misma Guardia Nacional se han desentendido de combatir a grupos criminales y no intervienen para desactivar a las células delictivas ni para contener las irrupciones armadas de estos grupos del narco que han obligado a ciudadanos de la sierra a desplazarse a otras zonas del estado o del país.

DELITOS AL ALZA

Denuncias presentadas por ciudadanos de la zona de la montaña refieren que al interior de sus comunidades es alarmante el crecimiento en las cifras de asesinatos, desaparición de personas, secuestros, extorsiones, cobros de cuotas, amenazas y desplazamientos forzados. Lamentablemente todos estos hechos no son denunciados por miedo, pero sobre todo al estar vulnerables y al no contar con una fuerza de seguridad verdadera, ya que las actuales autoridades no investigan y mucho menos castigan a los presuntos responsables. Es decir, en los pueblos de Guerrero se vive a merced del crimen organizado.

El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, que reconoce la información de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de que al menos 16 grupos del crimen organizado operan en Guerrero, identifica entre los de mayor nivel de agresividad y presencia a La Familia Michoacana, El Cartel Jalisco Nueva Generación, Los Tlecos, Los Ardillos y el Cártel Independiente de Acapulco. También destaca a cuatro cárteles locales tienen su centro de operaciones en la capital, Chilpancingo, una plaza que disputan Los Ardillos, Los Rojos, Los Jefes y el Cártel del Sur.

Frente a la amenaza que viven a merced de grupos del narco, los guerrerenses exigen una presencia real de una fuerza de seguridad que no tema a cumplir con la ley y con su objetivo que es defender a los ciudadanos, y no como actúa la Guardia Nacional en Guerrero, que no tiene ningún vínculo cercano con los ciudadanos, ya que responde solo a intereses de la clase política y de las élites económicas para custodiar instalaciones del Estado y para resguardar los lugares donde la población acude para manifestarse.

GRUPOS CRIMINALES

Información de la Secretaría de Seguridad Pública estatal y de la Sedena refieren que en Guerrero al menos 16 grupos vinculados con los cárteles de la droga operan en la entidad y se disputan varias plazas para el trasiego y venta de drogas.

Chilpancingo y Tixla: Lo disputan Los Rojos, Los Jefes, Los  Ardillos y el Cártel del Sur.

Taxco de Alarcón lo pelean La Familia Michoacana, Los Rojos, Guerrero Unidos y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

El municipio de Iguala lo pelean el Cartel de la Sierra y Guerreros Unidos.

El Puerto de Acapulco y la Costa Chica es centro de disputa entre Los Capuchinos y el Cártel Independiente de Acapulco.

Los municipios de Marquelia, San Luis de Acatlán, Cuajinicuilapa y Ometepec lo pelean los cárteles de Los Marín y Los Añorve.

El municipio de Técpan de Galeana lo pelean Los Granados y Los Chanos

El municipio de Zihuatanejo, uno de los centros turísticos más importantes después de Acapulco los pelean el Cartel Jalisco Nueva Generación, La Nueva Familia Michoacana y la Guardia Guerrerense.

Los municipios de Coyuca de Catalán, Pungarabato y Cutzamala de Pinzón los disputan La Familia Michoacana, Los Viagras y Los Caballeros Templarios.

La Sedena destaca también que en la zona de la Montaña se ha identificado la alianza de Los Tlacos con Los Rojos que están en guerra contra Los Ardillos; en la Costa Chica Los Ardillos tienen presencia especialmente en Ayutla y Tecoanapa, además de los grupos regionales de Los Carillo y Los Añorve, así como Los Rusos-Cártel de Caborca que tienen una alianza.