La Representante Comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, destacó que la política mexicana afectaría las exportaciones estadounidenses y tener un impacto negativo en los productores agrícolas.

Al no haber un arreglo con las consultas técnicas que llevaron a cabo las delegaciones de Estados Unidos y México para resolver la polémica sobre el maíz transgénico procedente de Estados unidos y que el gobierno de la 4T no quiere recibir, este viernes la administración del presidente Joe Biden, a través de su Departamento de Comercio solicitó oficialmente consultas de solución de controversias con México bajo el T-MEC debido a las preocupaciones sobre las políticas de biotecnología agrícola implementada por México sobre su postura sobre el maíz transgénico.

La Representante Comercial de EU (USTR), Katherine Tai, subrayó que la política de México podría afectar las exportaciones estadounidenses a México y tener un impacto negativo en los productores agrícolas.

“Las consultas técnicas no resolvieron el asunto”, señala el comunicado de la dependencia estadounidense, por lo que 62 legisladores del Congreso de EU firmaron una carta dirigida a Katherine Tai en la que expresan su inconformidad y preocupación por los dos meses que ya han transcurrido de las consultas técnicas y que no han arrojado ningún avance.

La funcionaria comercial de EU comunicó que las políticas de biotecnología de México no están respaldadas por la ciencia y representan una amenaza para las exportaciones agrícolas de su país.

Además, refiere que estas políticas obstaculizan la innovación agrícola que beneficia a los agricultores estadounidenses en su lucha contra los desafíos climáticos, al tiempo que afectan su productividad y medios de vida.

En la misma línea se expresó el secretario de Agricultura estadounidense, Tom Vilsack, quien hizo eco de las declaraciones de Tai y resaltó la importancia de un comercio justo y basado en la ciencia y no en los dichos. Vilsack destacó que México ha adoptado una posición equivocada sobre la biotecnología a pesar de que ha sido probada como segura durante décadas.

La intensificación de la disputa sobre el maíz se produce en medio de otras disputas entre ambos países, sobre todo en materia de energía en la que Estados Unidos argumenta que la política nacionalista de México perjudica a las empresas extranjeras.

Estados Unidos podrá solicitar el establecimiento de un panel especial de solución de diferencias si las partes no han logrado resolver el tema en un plazo de 75 días a partir de la solicitud de consulta, añadieron los funcionarios.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha afirmado que las semillas modificadas genéticamente pueden contaminar las variedades autóctonas milenarias de México y ha cuestionado su impacto en la salud humana.

RESPUESTA.

Por su parte, la Secretaría de Econmía informó que recibió este viernes una solicitud por parte de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos para iniciar consultas al amparo del capítulo 31 (solución de controversias) del T-MEC , referentes al Decreto del 13 febrero de 2023, en el que se establecen diversas acciones en materia de glifosato y maíz genéticamente modificado.

la dependencuia señala en un comunicado que ciertas disposiciones de dicho decreto afectan las importaciones de maíz de Estados Unidos a México. A través de un diálogo constructivo, la Secretaría de Economía, de la mano de otras dependencias del Gobierno Federal demostrará con datos duros y evidencia que: el uso exclusivo de maíz nativo para la masa y la tortilla no tiene afectación ni interés comercial para Estados Unidos, dado que México produce el doble de maíz blanco del que destina a la tortilla, nada menos que la base alimentaria de los mexicanos. En cambio, en la medida en que esta disposición fomenta que México preserve su producción con semillas nativas, se abona en el cumplimiento del capítulo ambiental del TMEC, en el cual los tres países se comprometieron a cuidar la biodiversidad.

Asimismo, refiere que gracias al nuevo decreto, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha estado en posibilidades de autorizar nuevas semillas de maíz biotecnológico y revaluar negaciones previas. Debe remarcarse que el maíz importado de Estados Unidos es complementario y se destina al uso industrial y a la alimentación de animales.