“Es orden Presidencial”, es lo único que les dicen los mandos a los elementos de Protección Federal, la policía auxiliar del Gobierno de la República a la que le han encargado el resguardo de las sucursales del Banco del Bienestar. Así de simple y a subirse al avión o al autobús para desplazarse a Yucatán, Michoacán, Tlaxcala, Nuevo León, Sonora y el resto de los estados, incluyendo zonas serranas… aunque sin un peso de viáticos.

El despliegue comenzó el día 29, por orden de Rosa Isela Rodríguez, una de las consentidas de AMLO y que, a pesar del presunto cargo como comisionada de seguridad ciudadana, no tiene ningún mando ni injerencia sobre la militarizada Guardia Nacional. Protección Federal, un cuerpo destinado a la salvaguarda de instalaciones, es lo único que le quedaba y lo que ofreció para cuidar los bancos del Bienestar.

La sorpresa para los elementos de la corporación es que el despliegue se ejecutó pero los viáticos no llegaron; bajando del avión y del autobús se les dijo que buscaran donde quedarse, solventaran su comida con sus propios recursos y que el asunto ya se arreglaría. La primera promesa, en realidad, era que este tipo de problemas no se presentarían, pues se pretendía una administración eficiente.

Wertman: «los voy a cuidar»

“¡Nos engañaron!”, es la reacción que comenta uno de los muchachos que fue enviado a Michoacán, zona rural, sin recursos para respaldar su despliegue. El asunto es que se supone que Luis Wertman Zaslav, el titular del Servicio de Protección Federal, es un empresario que venía del Consejo Ciudadano para la Seguridad y había alegado desde allí, una y otra, vez que no valía someter a los policías a condiciones que hicieran imposible cumplir con su misión.

“Que cada uno de ustedes se proponga ser el mejor policía, ser la mejor persona y ser siempre generadores de confianza”, les había dicho Wertman, unos meses antes, al par de generaciones de elementos de Protección Federal que envió a entrenarse a academia policiales, “es el principio de su proyecto de vida; esto tiene que ser su primera satisfacción para con sus familias, su comunidad y para nuestro país”.

Como empresario de renombre, la administración eficiente era esperada y de allí que se confiara en que los viáticos llegarían con anticipación en este tipo de despliegues estaba presente en los nuevos elementos de Protección Federal.

De la academia al abandono

Esos hombre y mujeres, entrenados con esmero, están ahora desplegados sin dinero para hospedaje y alimentación; con incertidumbre sobre cuando lograrán sus administrativos solventar esta problemática y dividiendo el sueldo entre su familia y la sobrevivencia en un lugar que no conocen y que muchas veces no está preparado para recibir foráneos que requieren hospedaje (los bancos del Bienestar están pensados en un alto porcentaje para lugares sin servicios bancarios).

Los bancos a cuidar están dando servicios desde el 1 de abril, así que el resguardo no se puede abandonar.

En algunos casos, los elementos piden también respaldo a efecto de que haya coordinación con la Guardia Nacional, pues se trata de zonas con alta presencia de crimen organizado.

Rosa Icela, Todo por AMLO