Un texto de garciamaro.com.mx
El secretario de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubón, se desmarcó del affaire político que desplegó el secretario de Gobernación (SG), Adán Augusto López, al responsabilizarlo de la política migratoria, y en cuyo contexto, murieron 40 migrantes, al registrarse un incendio en las celdas del Instituto Nacional de Migración (INM).
“Habrá quienes me dicen, bueno ¿y por qué el secretario de Gobernación quiere hablar sobre el tema, si él no es el encargado de operar el sistema migratorio? Aunque formalmente es la Secretaría de Gobernación”, explicó el titular de la SG.
Pero, durante la entrevista que ofreció a Joaquín López-Dóriga, Adán Augusto López, lanzó El misil que fue rechazado categóricamente por Ebrard, al destacar. “Para efectos administrativos, hay un acuerdo al interior del Gobierno y es Marcelo, el secretario de Relaciones Exteriores, quien se encarga del tema migratorio”, apuntó.
La respuesta, aunque breve, de Ebrard Casaubón, fue contundente para no engancharse en este punto aludido por su compañero de Gabinete. “Es una gran tristeza lo ocurrido: dejo cualquier consideración de índole política para otros momentos, cada cual debe hacer lo que le corresponde en esta hora”, subrayó.
En su gira de trabajo que realizó por Monterrey, Nuevo León, el canciller publicó en su cuenta de Twitter que este día hizo contacto con los gobiernos de Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, El Salvador y Venezuela, para informar de la tragedia ocurrida en Ciudad Juárez y apoyar a sus consulados para auxiliar a víctimas y familias afectadas.
“Les he transmitido la profunda indignación de México por lo acaecido y la voluntad del Gobierno y pueblo de México por esclarecer los hechos y sancionar a los responsables. La SRE ha solicitado a la Secretaría de Gobernación y al INAMI la información necesaria para compartirla con los países hermanos mencionados…
“Les he compartido que según se nos ha informado por esas dependencias, los responsables directos de los hechos han sido presentados ante la FGR”, reveló Marcelo Ebrard, quien no identificó a los empleados o funcionarios del INM que se encuentran involucrados en estos hechos, en los que perdieron la vida 40 centroamericanos.
Como se ha dado a conocer, las víctimas se encontraban tras las rejas del Centro de Detención Migratoria del INM, en el que según señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador, prendieron fuego, al saber que serían deportados a su país de origen.
“Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron de que iban a ser deportados, movilizados y como protesta, en la puerta del albergue (sic) pusieron colchonetas y les prendieron fuego y no imaginaron que esto iba a causar esta terrible tragedia”, detalló el jefe del Ejecutivo federal.
En el video que circuló en los medios de co9municación y en las redes sociales, se observa el momento en que se inició el fuego, y la forma en la que actuaron los empleados de ese lugar, quienes, salieron del inmueble, dejando a los migrantes a su suerte.
Al respecto, el Obispo de Ciudad Juárez, José Guadalupe Torres Campos, dijo esta tarde que esta terrible tragedia exige de las autoridades correspondientes, el esclarecimiento de lo sucedido y las acciones pertinentes para garantizar la seguridad de los hermanos migrantes que se encuentran en medio de nosotros.
Por su parte, en una entrevista que ofreció a los medios el responsable de la Casa del Migrante, Javier Calvillo Salazar, exigió que se castigue a los responsables de esta tragedia que tuvo lugar en las instalaciones del INM. “Esto no puede quedar así, donde hay instancias de Gobierno involucradas”.
“Vemos un tremendo descuido, una tremenda descoordinación entre los tres niveles de Gobierno, vemos aquí que realmente no hay una política migratoria clara, integral, humana y digna pues cada nivel de Gobierno hace lo que le conviene”, señaló el también sacerdote.
Mientras tanto, diversas organizaciones locales e internacionales condenaron estos hechos, y refrendaron a su apoyo a los cientos de migrantes que se encuentran en esta frontera. La mayoría de ellos, desde la noche del incendio, se encuentran apostados en el exterior del lugar del siniestro.
El pesar, el llanto y los gritos desesperados de los sobrevivientes y familiares de las personas fallecidas, contrastaban con la mirada fría y vigilante del personal militar y policiaco que resguardan las instalaciones, en las cuales, se colocaron arreglos florales, mantas de repudio y veladoras.
