El Senado aprobó este miércoles por unanimidad la reforma legislativa denominada «vacaciones dignas», que ampliará el periodo vacacional de los trabajadores de 6 a 12 días desde el primer año laboral.
El proyecto fue aprobado con 116 votos a favor y ninguna abstención, por lo que la medida, que recibió el visto bueno de las comisiones de Trabajo y Previsión Social del Senado y de la Cámara de Diputados la semana pasada entrará en vigor el 1 de enero de 2023.
El presidente del Senado, Alejandro Armenta anunció tras la votación que el dictamen será enviado al presidente Andrés Manuel López Obrador «para los efectos constitucionales correspondientes».
«Este Senado de la República se congratula por la reforma que se acaba de aprobar, que va a generar bienestar a las clases trabajadoras», añadió.
De este modo México trata de subsanar uno de sus principales problemas laborales, que lo colocaban a la cola de los países de América Latina en cuanto a días de vacaciones de sus trabajadores.
La reforma de los artículos 76 y 78 de la Ley Federal de Trabajo contempla que los trabajadores con más de un año de servicio disfruten de no menos de 12 días de vacaciones pagados y continuos.
Además, recoge que por cada año trabajado aumentarán las vacaciones dos días hasta llegar a los 20, y que un vez esto ocurra, al sexto año de servicio en la empresa, los trabajadores recibirán dos días más por cada cinco años laborados.
La senadora Patricia Mercado, del liberal Movimiento Ciudadano y una de las principales impulsoras del proyecto, dijo que los días de vacaciones son un derecho que «nadie puede regatear».
«Los derechos no se negocian, se establecen, se reconocen y se ejercen», expuso.
Además, subrayó que el balance entre los distintos aspectos de la vida es una condición «indispensable» para el bienestar.
«Sí necesitamos trabajar para vivir, pero no es racional ni saludable vivir para trabajar», continuó.
La reforma de la ley se logra tras discrepancias entre senadores y parlamentarios en cuanto a la redacción del texto y la postura contraria de los empresarios, que advirtieron de que implicaría un aumento de los costos laborales que serían insostenibles para empresas pequeñas.
A comienzos de noviembre el Senado aprobó también por unanimidad, la ampliación de las vacaciones, pero la reforma encontró resistencia en la Cámara de Diputados, donde algunos solicitaron modificar el texto en línea con las reclamaciones del sector privado. Finalmente, tras una negociación entre las dos cámaras legislativas, se consiguió aprobar el texto de forma definitiva.
Con información de EFE