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Conscientes del problema que significan las cárceles de la ciudad, el GPPRI en la ALDF presentó la iniciativa de decreto para crear la Ley Penitenciaria del Distrito Federal, por ser un tema de relevante importancia en la ciudad. Es un hecho que la readaptación social no funciona en la actualidad y están egresando verdaderos profesionales en delincuencia por el permanente semillero de corrupción.

Al describir esta realidad el Coordinador de los priístas en esta representación popular, Diputado Israel Betanzos Cortés, aceptó que en este compromiso por “limpiar” la operación de los reclusorios legisladores, autoridades del GDF, funcionarios del sistema penitenciario le siguen debiendo a la comunidad una actuación honesta, transparente y de verdadera readaptación social

Internos, custodios y familiares reconocen el cáncer que inunda las cárceles de la ciudad y que llena los bolsillos de unos cuantos. Incluso la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, acusó que la corrupción es parte de la gobernabilidad de los reclusorios y no debemos quedar estáticos ante la revelación, sino hacer un acto de conciencia y limpiar la podredumbre en la administración carcelaria.

En este sentido, insistió Betanzos Cortés, “de acuerdo a datos de la Subsecretaria de Prevención y Readaptación Social del DF, la capacidad de los 10 centros es de 22 mil reos, por desgracia la sobrepoblación rebasa 100 por ciento; es decir, actualmente tenemos 44 mil detenidos a consecuencia del ingreso, en promedio, de 300 por cada 100 mil habitantes”.

Esta situación es intolerante, precisó el diputado priísta, pues desde hace varios años no existe una ley que de verdad sirva para readaptar a los internos, o que prohíba las prebendas, a custodios, administrativos, a los directores de los Centros y a la gente externa que medra con las necesidades de los familiares de los detenidos.

Por lo tanto, pediremos a los presidentes de las Comisiones de Administración y Procuración de Justicia y Seguridad Pública de la ALDF, dictaminar lo antes posible dicha iniciativa, a la que se anexa la prohibición del ingreso de menores de edad a los centros de reclusión, para visitar a sus familiares pues tenemos información documentada, de que los jóvenes al entrar, sufren afectación en su desarrollo psicoemocional debido a que conviven con narcotraficantes, rateros, violadores, homicidas, entre otros.

Author: Rafael Cardona

Rafael Cardona